Algunos testigos afirman que ambas mujeres mantuvieron una fuerte discusión minutos antes del suceso, pero la Policía no ha podido aún esclarecer si existía algún tipo de relación previa entre ellas. La sospechosa, de 30 años, fue rápidamente detenida por las fuerzas de seguridad. "Una veintena de agentes de Policía la han escoltado fuera. (Ella) llevaba la cabeza alta, como si estuviera orgullosa de lo que hizo", según ha explicado un trabajador de la Autoridad Metropolitana del Transporte de la ciudad.
Según medios locales como el diario New York Post, la Policía está revisando las grabaciones de las cámaras de seguridad para comprobar si la mujer detenida es verdaderamente la responsable de este homicidio y si es cierto que hubo alguna discusión antes de que la víctima fuera lanzada a las vías.
Trastornos mentales
La sospechosa contaba ya con un amplio historial de desórdenes mentales, concretamente sufre episodios de bipolaridad y esquizofrenia, tal y como ha informado el responsable de la investigación, William Aubry.