Melania Trump ha querido sacar la cara por su marido asegurando que todo podría haber sido una trampa cuando le grabaron hace más de diez años.
Los comentarios lascivos y obscenos de Donald Trump en un vídeo de hace más de diez años no quedan de la noche a la mañana en el olvido, y es que esto está trayendo mucha cola. Su mujer, Melania Trump, ha concedido una entrevista a la cadena CNN que ha prometido mucho. Aún no se ha emitido, pero algunos momentos ya se han podido ver en Estados Unidos, y algunas de las preguntas que hicieron a la exmodelo eslovena se refería al polémico vídeo de 2005. Su respuesta al respecto es que "fue incitado" por el periodista Billy Bush, porque en privado nunca utiliza ese vocabulario. Para Melania Trump ésta es la primera vez que da la cara públicamente desde que el diario The Washington Post sacara a la luz dicha grabación en la que el candidato republicano a la presidencia de Estados Unidos alardeaba de la facilidad que tenía para acostarse con mujeres porque es 'una estrella'. Los comentarios fueron tachados de groseros, adúltero y machistas.
Una de las declaraciones que hizo Melania Trump en la entrevista fue: "Le dije a mi marido que el lenguaje era inadecuado. No es aceptable. Y me sorprendió, porque ese no es el hombre que yo conozco, nunca dice ese tipo de cosas en privado". En su momento también lanzó un comunicado donde expresaba su descontento con su marido: "Las palabras que Donald usó son inaceptables y ofensivas para mí".
La idea de ser una trampa
En cuanto a la idea de que todo podría haber sido una encrucijada, dijo: "Como se puede ver en la cinta, las cámaras no estaban frente a ellos. Fue solo un micrófono y me pregunto si es que sabían que el micrófono estaba abierto". Respecto a Donald Trump, él se defendió de la polémica en el segundo debate presidencial que tuvo lugar contra Hillary Clinton, diciendo que eran "comentarios de vestuario", pero a partir de ese momento, y tras acusar a Bill Clinton, marido de la candidata demócrata y expresidente de Estados Unidos, de abusos sexuales a otras mujeres, algunas otras han hablado y han dicho que el magnate en el pasado se sobrepasó con ellas, y tanto él como su partido lo han negado rotundamente.
Tras romper su silencio, Melania Trump ha dejado clara una cosa: "Creo a mi marido" y añadió: "Acepté sus disculpas y espero que los estadounidenses las acepten también". No obstante, la mujer de Trump ve este tipo de acusaciones como una manera de dañar a su marido: "Hay muchas personas en la oposición que quieren dañar la campaña".