El italiano nunca se imaginó lo que le esperaría en la carretera de Filotranno (Ancona), su ciudad natal, en la mañana del 22 de abril. Mientras entrenaba para completar su preparación para el Giro de Italia, Scarponi fue arrollado por una furgoneta en la intersección de una vía. El conductor de una Fiat Iveco no respetó la preferencia de paso y embistió al ciclista del Astana. En las primeras declaraciones ante los Carabinieri dijo que no había visto a Scarponi pero, ante la presencia de varios testigos que no podían creerse lo que estaban viendo, ahora será investigado por posible homicidio en carretera. Los médicos llegaron con rapidez a la escena pero no pudieron hacer nada por recuperar al que fuera un símbolo del ciclismo italiano, que falleció allí mismo.
Este trágico suceso ha consternado a todos aquellos que habían compartido kilómetros con Scarponi, que se mostraron desconsolados y profundamente dolidos. Mensajes de compañeros como Alejandro Valverde, entre otros, que escribía en Twitter: "Sin palabras. Se marcha una gran persona y un gran ciclista. DEP Michele Scarponi". Alberto Contador tampoco olvida al que le arrebató el Giro de Italia en 2011 tras quedar anulado por sanción. "Paralizado y sin palabras ante la noticia sobre el atropello a Scarponi, gran persona y siempre con una sonrisa contagiosa. D.E.P amigo", publicaba el madrileño.
El equipo para el que corría el italiano, el Astana, también ha mostrado sus condolencias mediante un comunicado en las redes sociales: "Perdimos a un gran campeón y a un chico especial, siempre sonriente. Era un símbolo para el grupo Astana".
Siempre con una sonrisa
Michele Scarponi será recordado por llevar siempre una sonrisa. Un hombre muy apreciado por todo el pelotón profesional, optimista, simpático, abierto y expresivo. Además, siempre se portó atento con los periodistas y con el público.
Tras el Tour de los Alpes le esperaba un gran Giro de Italia, para el que iba a ejercer de líder del Astana ante la baja de Fabio Aru. Todo parecía un buen augurio para el italiano que, a sus 37 años, todavía tenía cuerda para rato y que, tristemente, acabó su carrera en tragedia.