El Papa Francisco, Jorge Mario Bergoglio, ha fallecido a los 88 años en Roma tras doce años a sus espaldas de pontificado. La Santa Sede había alertado de los complicados problemas de salud que padecía el Papa y es cierto que se ha podido ver su deterioro con el paso de los días, pero tras su largo ingreso hospitalario de más de 30 días parecía que había remontado en cierta medida.
El cardenal Kevin Joseph Farrel, camarlengo del Vaticano, ha anunciado a través de un comunicado el fallecimiento del Papa: "Hace poco, su eminencia, el cardenal Farrell, ha anunciado con tristeza la muerte del papa Francisco, con estas palabras: 'Queridos hermanos y hermanas, con profundo dolor debo anunciar el fallecimiento de nuestro Santo Padre Francisco. A las 7,35 de esta mañana el obispo de Roma, Francisco, regresó a la casa del Padre ".
"Toda su vida estuvo dedicada al servicio del Señor y de su Iglesia. Nos enseñó a vivir los valores del Evangelio con fidelidad, valentía y amor universal, especialmente en favor de los más pobres y marginados. Con inmensa gratitud por su ejemplo de verdadero discípulo del Señor Jesús, encomendamos el alma del Papa Francisco al infinito amor misericordioso del Dios Uno y Trino ", concluía el comunicado.
Su ingreso hospitalario y última aparición pública
Fue el 14 de febrero cuando el Papa Francisco ingresó en el hospital Gemelli de Roma como consecuencia de una bronquitis que derivó en una neumonía bilateral. Durante todo su ingreso se estuvo temiendo por su vida, recibiendo partes médicos que indicaban empeoramientos o mejorías pero, finalmente, el Papa recibió el alta más de 30 días después y le hemos podido ver en varias ocasiones de manera pública, sin ir más lejos, el propio 20 de abril, donde realizó la bendición Urbi et Orbi con motivo del Domingo de Resurrección.

"Hermanos y hermanas, buena Pascua", decía a toda la gente que se congregaba a los pies del balcón principal de la Basílica de San Pedro. Tras esto, pronunciaba la esperaba bendición y se retiraba en su silla de ruedas. Lo que no se esperaba, pese a su delicado estado de salud, era que su fallecimiento se iba a producir tan solo unas horas después de este momento público. Se marcha un Papa que ha hecho historia.