El niño que tenía 11 años no vivía con sus padres, ya que estos se encontraban en otra ciudad trabajando y no se podían hacer cargo de él, por lo que éste vivía con sus abuelos, según ha explicado People Daily Online.
La cuerda se rompió y el pequeño cayó al vacío
La idea de los abuelos era que el pequeño accediera al inmueble a través de la azotea y en una cuerda ataron al niño para bajarle a la casa y accediera , con tal mala suerte de que la cuerda se rompió y el niño no pudo alcanzar su objetivo.
Y es que la cuerda se enganchó a la altura de la cuarta planta y se rompió provocando la caída del pequeño, que murió en el acto al impactar contra el suelo de asfalto. Rápidamente su abuelo bajó a socorrer a su nieto, pero nada pudieron hacer los servicios médicos por salvar la vida del pequeño.