El pasado 22 de diciembre de 2020 el mundo de la moda lloraba la muerte de una de las icónicas modelos de los años 90, Stella Tennant. Tal y como se había dado a conocer por aquel entonces, la británica había muerto de forma repentina a los 50 años en su propia casa sin darse ningún dato más respecto a su estado de salud o la causa de tan inesperada muerte.
Ahora, unas cuantas semanas después de su muerte, su familia ha vuelto a hablar públicamente de la muerte de Tennant para dar voz al verdadero problema que le causó la muerte: los problemas mentales. A través de un comunicado oficial publicado por The Daily Telegraph, " Stella no se encontraba bien desde hacía un tiempo ", decía respecto a sus problemas de salud mental, algo que hizo que "se sintiera incapaz de continuar" viviendo.
A través de estas palabras, su familia confiesa el "profundo dolor y desesperación" que sintieron por aquel entonces al verse incapaces de poder hacer algo por Stella Tennat durante su última etapa y piden, de nuevo, que se siga respetando su privacidad para poder sobrellevar la pérdida de alguien más importante de la forma más privada posible. No obstante, el portavoz de la familia considera importante hablar sobre lo ocurrido públicamente para "crear conciencia sobre la salud mental", algo a lo que con demasiada frecuencia no se le da importancia y se malinterpreta como un problema de importante magnitud.
Un carrera que empezó de forma repentina
Tennant comenzó de manera inesperada su exitosa carrera en el mundo de la moda. Fue 1993 cuando realizó una sesión de fotos que, tal y como se le había hecho saber a ella, sería para una campaña publicitaria de Versace, pero que finalmente acabó ocupando la porta de la famosa publicación Vogue Italia. Desde aquella portada de Vogue, Tennant desfiló para importantes firmas en las pasarelas de todo el mundo. Alexander McQueen, Prada, Versace, Calvin Klein y hasta para la española Ágatha Ruiz de la Prada. Su status en el mundo de la moda era tal que desfiló también en una de las pasarelas más importantes de los últimos años a la que solo tuvieron oportunidad de subirse otros iconos del mundillo: la ceremonia de clausura de los Juegos Olímpicos de Londres de 2012. La modelo desfiló ante la mirada de millones de personas junto a otras británicas como Kate Moss o Naomi Campbell.
Tennat comenzó a apartarse del mundo de la moda poco a poco desde que su principal ocupación era otra: formar una familia junto al fotógrafo David Lasnet. Junto a él tuvo a su primer hijo, Marcel, en 1998. Posteriormente llegaría también sus hijas Cecily, Jasmine e Iris. Desde entonces la modelo había vuelto a sus orígenes, el campo escocés, donde vivía tranquilamente alejada del foco mediático y centrada en una vida más tranquila y ecologista. La última vez se subió a una pasarela fue, precisamente, en enero de 2020 abriendo el desfilo de Valentino.