Felices y nerviosos estaban los especiales invitados elegidos para asistir a la primera 'cena de Estado' para niños, ofrecida en la Casa Blanca, residencia oficial del Presidente de Estados Unidos en Washington, por la Primera Dama, Michelle Obama.
En un ambiente distendido, los 54 niños, que estuvieron acompañados de sus padres, pudieron saludar, hablar y comer tranquilamente con Barack Obama, que 'se coló' en la cena, y con su esposa Michelle, que salió al estrado para ofrecer unas palabras a los presentes.
La cena estaba enmarcada en el programa 'Let's move'
En las mesas redondas, puestas con todos los honores para agasajar a los pequeños, había centros con frutas, floreros llenos de fresas, cubertería de plata, vasos especiales y otros detalles que hicieron las delicias de los invitados.
Todos ellos pudieron disfrutar de platos exquisitos y sanos. Como entrante hubo una ensalada presentada con primor y con muchos ingredientes, de segundo una hamburguesa, y de postre una brocheta de verdura y un sorbete de fresa.
Los 54 niños y sus progenitores también pudieron disfrutar de un concierto en directo dentro de una cena enmarcada en el programa 'Let's move', desde el que combate la obesidad infantil a través del ejercicio y la buena alimentación.