Después de varios días en las que cada vez más voces pedían que diese un paso atrás a causa de sus comprometidas conversaciones con el comisario Villarejo, María Dolores de Cospedal ha difundido este lunes 5 de noviembre un comunicado en el que anuncia que renuncia a su "condición de miembro del Comité Ejecutivo Nacional del Partido Popular".
Su dimisión coincide temporalmente con la difusión de una nueva conversación con el excomisario en la que junto a su marido encargaba investigar al hermano de Alfredo Pérez Rubalcaba, por entonces Ministro del Interior. A esta habría que unir una anterior en la que, en términos similares, pretendía espiar también a su compañero en el partido Javier Arenas.
En su comunicado, la que fuera Secretaria General del Partido Popular y Ministra de Defensa asegura que ha tomado su decisión "para evitar que los ataques se hagan extensivos" a su formación política. Aún así, reitera nunca haber mentido acerca de su relación con Villarejo y mantiene que era su "obligación".
Un puesto cada vez más cuestionado
A pesar de su renuncia a seguir formando parte de la ejecutiva del PP, Cospedal sigue siendo diputada en el Congreso de los Diputados. Se desconoce si continuará allí por mucho tiempo defendiendo que, tal y como ella mantiene, "las cintas publicadas tratan de ofrecer una imagen distorsionada de la realidad".