La actriz reconoce que sus propias vivencias y las de personas de su entorno les influyen a la hora de escribir, y recuerda una triste anécdota sucedida cuando gracias a una de sus hijas, su marido y ella se fijaron en una persona sin hogar en la que no habían reparado hasta el momento: "A mi marido y a mí nos golpeó mucho una vez que íbamos por el parque y había una persona sin casa que tenía un cartel que decía: 'Estoy tan cerca que no me ves'. Y una de mis hijas lo leyó: 'Yo sí le veo. ¿Tú no le ves? ¿Es que para alguien es invisible?' Yo pensé: 'Pues para nosotros, hemos pasado por aquí 20 veces y yo no había visto a este señor'. Nos sacudió muchísimo. La pobreza puede estar ahí al lado de tu casa", declara la intérprete, que pone de manifiesto que la pobreza no solo está en África como se suele señalar, sino que todos la podemos tener al lado y que nos pase desapercibida. Otra historia que rememora fue la enfermedad de una persona cercana, que afortunadamente salió adelante gracias a la Sanidad Pública de España: "Es como una hermana y veíamos lo afortunados que somos de que esto le haya pasado aquí. Le llega a pasar en otro país e igual no hubiéramos tenido un final tan feliz. Vamos a hacer un canto a esta sanidad que nos ha salvado de todos estos momentos", asegura sobre otro de los libros de Miranda y Tato.
Hay Manolita para rato
Estos cuentos los publica Edelvives. ¿Lo consiguió por ser Itziar Miranda, la actriz que interpreta a Manolita en 'Amar es para siempre' y vende más por eso?'. No. Lo primero, para obtener el sí necesitó la aprobación de una niña de 8 años. Tan curioso como real. Lo segundo, no quería que su nombre apareciera en la cubierta en la Colección Miranda. Lo que pasó fue que durante 5 años casi nadie sabía que ella estaba detrás y cuando los lectores, pequeños y no tan pequeños, iban a las firmas de libros ni se creían que ella fuera la autora: "Ahora la gente sabe que lo escribo yo, pero da igual porque quieren que Miranda les cuente historias. Los niños fans de Miranda no sabían ni de broma quién era yo, y mira que hay muchos fans de 'Amar' que tienen la edad de los lectores de Miranda. Igual me conocían como Manolita, no por mi nombre. Cuando se han dado cuenta después del éxito, ha sido un regalo".
Y sobre Manolita, o Manuela, que como dice Itziar Miranda, ya tiene una edad, asegura que no le importa que le llamen así por la calle: "Me encanta que la gente me llame Manolita porque me lo dicen con un cariño, un amor... Es precioso que la gente por la calle te pare. Es verdad que cada vez más gente me llama por mi nombre, pero otros me dicen: 'que no me acuerdo de tu nombre: Manolita'. Manolita me ha dado mucho. Es culpa de Manolita que haya escrito una colección feminista. Manolita es un símbolo de nuestras madres y nuestras abuelas, de todas esas mujeres que vivieron la posguerra y que hicieron tanto por nosotras, que fueron un ejemplo y nos dejaron un legado y un camino brutal. No podemos dejarlas en la estacada, tenemos que seguir con ese camino. Todo lo conseguido es por mujeres como Manolita. Parte del éxito de la colección Miranda y de cómo hemos entendido a las mujeres también lo tiene Manolita. Manolita es para siempre. Yo estoy feliz, esto es que te toque la lotería, con un trabajo que te apasiona. Me suena el despertador a las 05:30 y soy la persona más feliz del mundo levantándome a esa hora sabiendo que voy a trabajar en algo que me encanta, en una serie que acompaña a tanta gente que está sola, que nos sienten como su familia, que estamos contando una historia real, la historia de nuestro país, Y la estamos contando sin paños calientes", declara la actriz, que por si hay dudas, deja claro que no se ha cansado ni de la serie, ni de su personajes y que hay Manolita para rato.