Pablo Casado ha sido elegido con apenas 37 años como el nuevo Presidente del Partido Popular tras el XIX Congreso Nacional Extraordinario del partido político. La lucha por llegar al poder ha durado semanas, desde que Mariano Rajoy anunciase su dimisión como líder del PP después de 14 años al frente del partido. Aunque toda la atención la haya acaparado el joven político, que ve cómo uno de sus sueños se ha cumplido, a su lado siempre ha estado su mujer Isabel Torres Orts.
Isabel Torres, nacida en Alicante, es nieta del empresario Luis Torres Fenoll, llamado el 'rey de los caramelos'. Procede de una familia acaudalada, ya que además de su abuelo, sus padres son Luis Torres Candela y María Dolores Orts, una de las descendientes de los propietarios del grupo Huerto del Cura. La esposa de Casado es una mujer muy discreta, ya que siempre se ha mantenido al margen del foco mediático. Además, trabaja como psicopedagoga en un colegio del norte de la Comunidad de Madrid.
Un amor universitario
La relación entre Casado y Torres se remonta a su etapa universitaria, cuando residían en uno de los colegios mayores que están en Madrid, cerca de su universidad. Él estaba estudiando Derecho y Dirección y Administración de Empresas, mientras que ella estaba estudiando la licenciatura de Psicología.
" Lo mejor de ella es todo. Es una persona extraordinaria. Por eso me casé con ella. Es mucho mejor que yo. Claramente, yo salí ganando... A mí me parece que es muy guapa, muy lista, muy buena madre, muy buena esposa, muy buena profesional... ", confesó el líder del PP. Una pareja que compenetró desde el mismo instante en el que se conocieron durante una fiesta en su Colegio Mayor.
Por ello, el 20 de junio de 2009 decidieron dar el siguiente paso, dándose el 'sí, quiero' con una boda por todo lo alto en la Basílica de Santa Maria de Elche, la tierra natal de Torres. Su boda fue uno de los mayores acontecimientos por aquellas fechas en la ciudad alicantina ya que acudieron varios personajes de primera línea de la política de ese momento, entre ellos, el ex Presidente del Gobierno, Jose María Aznar, y la ex Presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre.
El momento más duro para Isabel Torres
Isabel y Pablo tuvieron que pasar por uno de los momentos más duros por el que pueden pasar unos padres, un hecho que sin duda les ha marcado profundamente: el nacimiento de su hijo Pablo de forma prematura el 16 de marzo de 2014. Cuando los médicos descubieron qué estaba ocurriendo le comunicaron a Isabel Torres que solo existía una opción, y era la de permanecer inmóvil hasta que el pequeño creciera lo suficiente como para proceder con el parto.
Un momento crucial para la vida del pequeño, en el cual Casado estuvo en todo momento a su lado, ya que no se separó ni una sola noche a pesar del trabajo, compartiendo sus inquietudes durante las tres semanas que duró este episodio en sus vidas. La reclusión de Isabel terminó a las 25 semanas de gestación, cuando el bebé finalmente nació pesando tan solo 700 gramos. " Mi mujer rompió la bolsa en la semana 20 y parecía un parto inviable. Pablo nació con 700 gramos. Hubo que operarle de corazón pesando 730 gramos y nos avisaron que con poco futuro. Estuvo ingresado cuatro meses en la UCI y salió adelante. Es guapísimo y va como un tiro ", explicó el nuevo líder del PP.
Cuando por fin le dieron el alta, Isabel llevó a cabo cada una de las recomendaciones que los médicos le dieron para un bebé nacido de forma prematura. La pareja, que durante el tiempo en el que Pablito estuvo ingresado hicieron la promesa de completar el Camino de Santigo, agradecieron todo lo que había hecho el equipo médico durante todo ese tiempo, así como a los familiares que estuvieron a su lado. No fue hasta 2017, cuando la familia al completo se aventuro por fin a cumplir la promesa de recorrer el Camino de Santiago.
El matrimonio ha formado una feliz familia con sus dos hijos, el ya mencionado Pablo y su hija mayor, Paloma, que nació dos años antes que su hermano pequeño. Los cuatro viven en Madrid, en un piso ubicado en el barrio de Salamanca, valorado en más de medio millón de euros, que adquirieron con una hipoteca de 280.000 euros que pidió en su momento el líder popular. Pero cuando no están en la capital disfrutan bajando a Elche, donde está la familia de Torres y donde también poseen un piso con unas maravillosas vistas.