El pequeño Yuusuf Warsame nació hace ocho años en Birmingham (Gran Bretaña) pero se encontraba de viaje en Suecia para visitar a unos familiares, los cuales no esperaban que esta sería la ultima que le verían.
El niño estaba dormido a las tres de la mañana en una casa en Gotemburgo cuando una granada de mano entró por la ventana de la habitación en la que descansaba y detonó, causando su muerte en el acto.
El portavoz de la Policía, Thomas Fuxborg, ha indicado que el menor no formaba parte de la familia registrada en la vivienda y ha informado que se está investigando si el atacante buscaba vengarse de unos inquilinos que no tenían lazos sanguíneos con el pequeño. Aunque sospechan que el ataque, calificado de asesinato, se trata de una venganza, pues uno de los hombres que se encontraba en la vivienda esta condenado por un tiroteo mortal en la misma zona.
How an eight-year-old boy became the latest victim of Gothenburg's gang conflicts https://t.co/XTdiGgVhDf#swedenpic.twitter.com/pHpcdX3Jfr
? The Local Sweden (@TheLocalSweden) 23 de agosto de 2016
El niño no tenía la culpa
Thomas Fuxborg señaló para el medio sueco The Local que lo que no encontraba lógica a lo sucedido: "Esto es aberrante. Desde fuera es imposible saber quién está en el apartamento. Este ataque, que ha afectado a un niño de ocho años totalmente inocente, es despreciable ". Sin embargo reconoció que "pudo haber acabado mucho peor" ya que en ese momento cinco niños y varios adultos se encontraban en la vivienda.