Los agentes del servicio secreto se apresuraron a sacar a Donald Trump fuera del escenario lo más rápido posible tras recibir una alarma de posible tiroteo durante su campaña. Consideraban que uno de los presentes en el mitin podía suponer una amenaza para el candidato republicano así como para todos los que estaban en el lugar.
Al parecer los agentes gritaron "¡marchaos! ¡marchaos!" y rápidamente todos los cuerpos de seguridad que había alrededor de él le agarraron y se le llevaron detrás del escenario. Por su parte, la seguridad que había abajo del escenario cogió a Austyn Crites, de 33 años, sospechoso de tener un arma. Le tumbaron en el suelo y le dejaron inmovilizado ante la incredulidad de los allí presentes.
El sospechoso apoyaba a Hillary Clinton
Crites se trata de un republicano pero que apoya a Hillary Clinton según se puede leer en su cuenta personal de Facebook. Un funcionario de la campaña de Trump ha explicado a Daily Mail que este hombre causó verdadero pánico entre la multitud cuando se llevó la mano a la cintura. Este mismo funcionario no dudó en gritar "¡tiene una pistola!" causando un gran revuelo a los pies del escenario.