Pero fue el discurso que dio Asia Argento, actriz y directora italiana, durante la Gala de Clausura del Festival (cuando se entrega, entre otros muchos premios, la Palma de Oro) el que sin duda más impacto ha causado. La italiana se subió al escenario para hacer entrega del premio a 'Mejor actriz' en las películas de esta edición cuando aprovechó para hablar alto y claro ante la atenta mirada de todo el auditorio.
"En 1997 fui violada aquí en Cannes por Harvey Weinstein. Yo tenía 21 años. Este festival era su coto de caza. Quiero hacer una predicción: Havery Weinstein nunca más será bienvenido aquí", fueron sus primera palabras. Este testimonio no es desconocido ya que Argento fue la primera mujer en dar su testimonio a The New York Times para el artículo que sacó a la luz los abusos por parte del productor cinematográfico.
Pero esto no era lo único que tenía que decir. Sin temblarle la voz y contundente siguió adelante: "Hoy se siguen sentando entre nosotros otros que han tenido un comportamiento indigno con las mujeres. Saben quiénes son. Y, lo más importante, nosotras lo sabemos, y no vamos a permitir que viva en la impunidad".
Entregados con la causa
El Festival de Cannes era como una segunda casa para Harvey Weinstein y escenario de muchos de los hechos denunciados desde octubre de 2017. Con esta mala etiqueta, el festival ha querido también poner de su parte en la que es la primera edición desde que se destapó el escándalo de los abusos. Más allá de los gestos ya mencionados, la propia organización repartió entre los acreditados un folleto en el que hacían alusión al acoso sexual, a su pena de cárcel de hasta 3 años de prisión, multas de 45.000 euros y también presentaban una línea telefónica en la que se podían denunciar posibles abusos.