El hijo de Rodolfo Sancho mantiene su declaración sobre lo que le llevó a matar al cirujano, con el que tenía una relación especial.
Daniel Sancho continúa cumpliendo condena en la prisión tailandesa de Koh Samui mientras espera que se celebre el juicio por su presunto asesinato de Edwin Arrieta. Fue el 4 de agosto de 2023 cuando confesó haber matado al que había sido su amigo, si bien es cierto, sigue habiendo asuntos que no se han aclarado.
Según ha hecho saber el programa 'Caso Abierto', Daniel Sancho ha sumado ahora una nueva versión de los hechos con la que intentaría evitar ser condenado a muerte en Tailandia. En esta nueva versión insiste en que Edwin Arrieta había intentado violarle, y él habría actuado de manera violenta en su defensa. De nuvo ha dicho que el día del asesinato intentó romper su relación con Edwin Arrieta, y la cosa se fue de las manos. El cirujano se negó a aceptar la ruptura y quiso agredir a Daniel Sancho sexualmente, tal y como él ha dicho. Una fuerte pelea entre ambas partes habría terminado con Arrieta golpeándose la cabeza contra uno de los muebles del baño, aunque las pruebas forenses determinaron que en realidad no murió por el golpe, sino desangrado por el corte en el cuello que el propino Daniel Sancho.
Pese a que este es el asunto pendiente más grave que tiene a sus espaldas, no es el único, porque el Juzgado de lo Penal número 16 de Madrid ha suspendido el juicio que tenía previsto celebrarse el 7 de noviembre de 2023 contra Daniel Sancho por la presunta comisión de un delito de lesiones cometido en 2019 en Madrid. Esta suspensión se produce tras recibir una notificación de la Fiscalía de Tailandia en la que deja claro que su declaración por videollamada no iba a ser posible. Apoyado por su padre
Asimismo, tampoco ha declarado por el asesinato pese a que tuvo la oportunidad de hacerlo. Saniel Sancho se negó a decir una sola palabra, y parece que sus abogados, tanto el tailandés como los españoles, lucharán por defender su inocencia y conseguir la menor condena posible. En esta última ocasión viajó su padre Rodolfo Sancho, quien estuvo a su lado y tuvo un encuentro mucho más cercano con su hijo en la prisión tailandesa.