Y es precisamente en este recurso al que tuvo acceso la Cadena Ser donde se encuentra una defensa que ahora choca con lo narrado por el Diari Ara tras haber tenido acceso a las imágenes captadas por las cámaras de seguridad de la discoteca la noche de los hechos y que recogieron todo lo ocurrido de antes y después de entrar en el cuarto de baño donde se habría producido la presunta violación.
Los letrados del futbolista, Cristóbal Martell y Arnau Xumetra, apelan a un cortejo mútuo entre ambos: "Los 20 largos minutos en que el grupo se relaciona antes de acudir la pareja al lavabo distan en patentizar un microcosmos de pánico terror (...) Más bien muestran a dos adultos desarrollando un juego erótico de seducción preambular a un coito". Pero según el mencionado medio, lo que captan las imágenes es lo siguiente: "En un momento, la víctima estaba de espaldas al futbolista, pero él le agarró la mano y la llevó a la zona de sus genitales. La chica la sacó de repente y, disimuladamente, alargó su mano hacia su prima para seguir bailando con ella y alejarse de Alves", repitiéndose algo parecido minutos después: "Bailaron cara a cara y Alves bajó la mano hasta el trasero de la chica. Ella volvió a quitársela".
"Alves bajó la mano hasta el trasero de la chica. Ella volvió a quitársela"
Según explican lo que se observa en las imágenes, el interior estaba oscuro y no se veía que se trataba de un baño, algo que la propia víctima ha relatado también en sus declaraciones: "La chica se dirigió de tal manera que sólo ve a Alves adelante de la puerta y no podía captar qué había dentro. No había ningún rótulo en la puerta. Ella, según declaró, pensaba que iban a una zona para fumadores. Su idea era despedirse del futbolista después de hablar con su prima porque no estaban cómodas".
"Se nos ocurren mil razones para que una mujer joven que ha realizado sexo con un varón de 40 años estalle en llanto"
Ya en el pasillo tras abandonar el VIP se ve como la joven rompe a llorar: "Uno de sus primeros gestos fue señalarse rápidamente la rodilla, donde tenía una herida que el informe médico recogió. Luego, se abrazaron. Durante todo ese rato no paró de llorar. Ante esta situación, un guardia de la discoteca se acercó. La chica, de nuevo, se señaló a la herida". Un llanto que también aparece recogido en el escrito de la defensa del futbolista que presentó a la jueza: "Un llanto no necesariamente deriva de un acto sexual inconsentido (se nos ocurren mil razones distintas a la agresión para que una mujer joven de 23 años que ha realizado sexo con un varón de 40 en un lavabo estalle en llanto)".
Las cámaras captan también el momento el que Alves sale de la discoteca y pasa al lado de la joven mientras estaba llorando haciéndole caso omiso, como si no la conociese de nada a pesar de haber tenido, según él, relaciones sexuales consentidas en el baño: "El futbolista, con un suéter encima de la camiseta blanca y una gorra puesta, pasó junto al grupo sin detenerse e incluso se le ve dar un pequeño paso para esquivar a las chicas y al guardia. La conversación se detuvo y lo miraron sin decir nada", apuntan desde el Diari Ara. Fue entonces cuando se activó el Protocolo de seguridad contra las violencias sexuales en entornos de ocio vigente en Cataluña.