Ana Garrido vive un calvario por el que jamás habría imaginado que iba a pasar el día que empezó a trabajar como funcionario del Ayuntamiento de Boadilla del Monte. Una pesadilla que comenzó el día que se negó a seguir cumpliendo órdenes del Alcalde que conducían a ilegalidades.
" Me interesa que la sociedad conozca lo que hacen con nosotros, los denunciantes de la corrupción, y que se sepa que aquí el que acaba perseguido es el denunciante, y no el corrupto", declara justificando su desnudo para la portada de Interviú al tiempo que asegura que "nunca, ni en los momentos más duros", se ha arrepentido de destapar parte de la trama Gürtel.
Ana Garrido lo perdió todo
Algo que le ha traído muchas consecuencias tanto a nivel personal como laboral: "Tengo alquilada mi casa para poder pagarla, porque me la iban a embargar. He tenido muchos problemas familiares. Y un gran desgaste psicológico por la cantidad de juicios a los que he tenido que atender. Perdí a mis amigos. Y también mi trabajo, pese a que gané en segunda instancia un juicio por acoso laboral; tuve que renunciar por no volver a lo que se había convertido en una celda de castigo. Y no encontré más trabajo, porque mis empleadores recibían llamadas diciendo que podía dar problemas ".
Ahora vive en Mallorca y diseña joyas y bisutería. Entre sus diseños hay una pulsera dedicada a Esperanza Aguirre. De hecho en el reportaje cuenta cómo fue todo el proceso desde que decidió denunciar y asegura estar convencida de que " Esperanza Aguirre va a acabar imputada, seguro ". Solo el tiempo o, mejor dicho, la investigación judicial, lo dirá.