Guiffre no solo ha asegurado que se convirtió en su esclava sexual, sino también ha revelado uno de sus fetichismos. En sus declaraciones que parece que tuvieron lugar en 2016, Roberts Guiffre aseguró que estuvo dos días ejerciendo como esclava sexual del Príncipe Andrés en un rancho ubicado en Santa Fe, en Nuevo México. Una de las peticiones era lamer los dedos de sus pies. La testigo está preparando un libro cuyo título puede que sea 'El Club del Playboy Billonario' y en él relata que no le fue fácil soportar algunas de las extrañas preferencias sexuales como ese fetichismo podológico del Duque de York, con quien mantuvo relaciones sexuales en tres ocasiones según ella misma ha hecho saber.
"Amaba mis pies e incluso me lamía entre los dedos", ha dicho Giuffre sobre el Príncipe, y ha contado en el Daily Mail que Ghislaine Maxwell la envió sola al enorme rancho de Epstein cuando tenía entre 17 y 18 años, donde la esperaba el Duque de York, con quien supuestamente ya había tenido relaciones sexuales al menos una vez en Londres. "Me rodeó con sus brazos y me saludó como un viejo amigo. Le devolví el abrazo, poniendo los ojos en blanco y temiendo lo que me esperaba en los próximos días", ha añadido sobre esta traumática experiencia.
Y otras de sus declaraciones fueron las siguientes: "Mi trabajo era entretenerlo sin fin, ya sea que eso signifique complacerlo con mi cuerpo durante un masaje erótico o simplemente llevarlo a pasear en caballo". Y añadía: "Creo que se lo asó muy bien, parecía relajado y cuando se despidió me dio un beso. Lo llevé a pasear en caballo, alrededor de la propiedad, fuimos a nadar en la piscina y, por supuesto, le hice muchos masajes. Le hice masajes al menos dos veces al día, pareció disfrutarlo".
Donald Trump desea lo mejor a Maxwell
De todos estos escándalos cabe señalar que Ghislaine Maxwell, socia directa de Jeffrey Epstein y con la que mantuvo una relación, por fin fue detenida tras muchos años de búsqueda y ha sido ingresada en la misma prisión en la que Einstein fue encontrado muerto. El motivo por el que hay ingresado en la cárcel es porque ha sido acusada de ser la facilitadora de las menores que el pedófilo pone a disposición de diferentes clientes, entre los que se encontraría el Príncipe Andrés. Ha sido el Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, el que ha querido enviar un mensaje a Maxwell, diciendo: "Francamente le deseo lo mejor". A su vez, ha dejado caer que le da pena el hecho de que quizás estén no se suicidaron la cárcel, que pudo haber sido asesinado. El financiero fue encontrado muerto en la prisión de Manhattan en agosto de 2019, poco después de haber sido juzgado y de haber ingresado en la misma por todos sus delitos sexuales, y poco después se terminó le he dicho fallecimiento se trató de un suicidio, aunque el mismo presidente ha decidido ponerlo en duda.
Sus palabras sobre Maxwell fueron las siguientes: "Todavía hay que demostrar que es culpable de las acusaciones y su novio murió en la cárcel, y la gente todavía está tratando de descubrir cómo sucedió", y concluía: "No estoy buscando nada malo para ella. No estoy deseando mal para nadie".