La hija de la Infanta Elena regresó a Formentera para disfrutar de unas vacaciones con amigos con los que salió a navegar.
Victoria Federica tiene ganas de disfrutar de la vida al máximo, sobre todo en verano. Atrás quedó aquella niña y adolescente tímida que parecía que no había roto nunca un plato. La hija de la Infanta Elena se dio cuenta de que la fama le iba a perseguir para siempre, así que lejos de apostar por un perfil bajo, decidió explotar ser una cara conocida y convertirse en influencer.
Todo eso tiene muchas cosas buenas. Obtiene ingresos yendo a eventos, siendo imagen de marcas y viajando. La parte negativa es que recibe mucha más atención, la prensa le sigue por la calle para hacerle preguntas y los paparazzi están al acecho para tomar imágenes de la nieta del Rey Juan Carlos.Así, los fotógrafos fueron testigos de sus andanzas en Formentera, la isla más idílica de las Baleares y que disfrutó en compañía de un grupo de amigos durante una jornada de navegación en la que hubo mucha diversión, sobre todo en el mar.
Victoria de Marichalar saltó del barco para darse un baño y llevó un scooter eléctrico subacuático para aprovechar al máximo esta jornada de navegación en la que no faltaron luego los brindis y las confidencias con los amigos que le acompañaron en estas vacaciones en Formentera.Un verano de playa y diversión
Victoria Federica se quedó sin vacaciones en Marivent, al menos durante la estancia de los Reyes Felipe y Letizia en Mallorca, pero tampoco se puede quejar. Ha pasado por Ibiza y Formentera, ha viajado a Marbella, donde ha estado con su hermano Froilán, y ha vuelto una vez más a Formentera, donde le esperaban amigos y más momentos estivales para recordar. Está claro que Victoria Federica sabe divertirse.