A pesar de la pandemia, la Reina Letizia no dudó en realizar un viaje de cooperación que no ha sido exactamente como los anteriores en los que ha participado desde que se convirtió en Reina de España. Debido a la devastación que provocaron los huracanes Eta e Iota a su paso por Honduras, la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo se puso manos a la obra para ayudar en la medida de lo posible al país centroamericano. Doña Letizia ha sido la cara visible de este viaje más humanitario que de cooperación.
Doña Letizia aterrizó en la Base Aérea Coronel Héctor Moncada de La Ceiba el lunes 14 de diciembre de 2020 para pasar dos días en Honduras. No debía haber aterrizado allí, pero los estragos de los huracanas han dejado al aeropuerto de San Pedro Sula fuera de servicio de forma temporal. Se le dieron todos los honores, siendo recibida por el secretario de Estado de Relaciones Exteriores y Cooperación Internacional, Lisandro Rosales, la embajadora de Honduras en España, María Dolores Agüero, y el embajador español, Guillermo Kirkpatrick. El alcalde de La Ceiba, Jerry Sabio, aprovechó para darle como regalo un cuenco creado por artesanos hondureños.
La Reina, que eligió como atuendo una camisa blanca de manga larga, pantalones beige y botas marrones, además del chaleco rojo de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo y mascarilla de la AECID, viajó por carretera a San Pedro Sula, donde se alojó. Después de la recepción oficial a pie de pista, tuvo una recepción por parte del embajador de España en la República de Honduras y la directora de cooperación con América Latina y el Caribe antes de participar en una reunión con las ONGS española sobre la respuesta humanitaria a los huracanes Eta e Iota.
Al término de la reunión se entrevistó con el Presidente de la República de Honduras, Juan Orlando Hernández, y la Primera Dama, Ana García, que le esperaban en la Base Aérea Coronel Armando Escalón Espina. La Reina vio en un vídeo los daños causados por los huracanes y cómo se lucha para reconstruir las zonas dañadas. Después vieron una muestra de las 120 toneladas de ayuda humanitaria enviadas desde España. La ruta llevó a Doña Letizia posteriormente al Centro de Educación Básica Oswaldo López de Arellano, donde antes de visitar el Instituto Patria, donde se ha acogido a 420 damnificados por los huracanes.
La Reina no solo recorrió las instalaciones, sino que conoció los testimonios de algunas de las personas que se encuentran refugiadas en este lugar apoyado por la cooperación española. A pesar de la necesaria distancia por la pandemia, Doña Letizia se mostró lo más cercana posible y escuchó lo que tenían que decirle esas personas, sobre todo mujeres y niños que lo han perdido todo o casi todo. La Reina de España ofreció esperanza, aliento y comprobó en primera persona la devastación provocada y la necesidad de ayuda. Antes de volver a España asistió a un almuerzo ofrecido por el Presidente de la República de Honduras y la Primera Dama con el que le dieron las gracias por su visita.
Agradecimiento de la Unión Europea
También la Unión Europea ha agradecido a la Reina y a España el apoyo: "La Unión Europea aumenta el apoyo en 5 millones de euros y ofrece asistencia a las victimas del huracán en América Central. Agradezco a la Reina Letizia que haya puesto el foco en la situación de la zona, así como a Austria y Francia por su ayuda", señaló Janez Lenarcic, Comisario Europeo de Gestión de Crisis, que a través de Twitter también dio a conocer por retuits de la Dirección General de Protección Civil y Ayuda Humanitaria parte de lo que ha llevado la Reina Letizia como parte de la ayuda humanitaria desde España.