Las vacaciones del PrÃncipe Guillermo y Kate Middleton con sus hijos en Anmer Hall han dado para mucho.
Aprovechando que los niños tenÃan vacaciones en el colegio entre el 14 y el 23 de febrero de 2020, los Duques de Cambridge hicieron las maletas y se marcharon del Palacio de Kensington durante unos dÃas para poner rumbo al norte y disfrutar de una estancia en familia.
El lugar elegido no fue la exclusiva isla caribeña de Mustique que tanto gusta a los Middleton, ni tampoco las lujosas pistas de esquà de Suiza, sino el lugar en el que más tranquilos se sienten los Cambridge y donde vivieron de forma permanente durante una temporada: Anmer Hall.Los Duques de Cambridge adoran pasar sus vacacaciones en su casa de campo de Norfolk, una propiedad cedida por la Reina a dos pasos de Sandringham en la que pueden alejarse del caos de Londres y disfrutar de la naturaleza y de la tranquilidad que ofrece esta zona de Reino Unido.
El PrÃncipe Guillermo y Kate Middleton quieren que sus hijos conecten con la naturaleza, y por eso ayudaron a que unas ovejas dieran a luz. Asà lo contó el primogénito del PrÃncipe de Gales con motivo de su presencia en el partido que enfrentó a Gales y a Francia en el torneo Seis Naciones de rugby en el Millennium Stadium de Cardiff.Contacto con la naturaleza
Allà le contó a la maestra Rhian Roberts que habÃa estado en una granja con sus hijos y que habÃan ayudado a nacer a un corderito. El PrÃncipe Jorge fue directo a ver qué podÃa hacer, mientras que a la Princesa Carlota le costó un poco más animarse. Mientras tanto, el PrÃncipe Luis estaba como loco con los tractores.
Los hermanos Cambridge no solo ayudaron a nacer al corderito, sino que alimentaron a las ovejas. En esto seguro que les ayudó Kate Middleton, que durante su visita a una granja escuela de Irlanda del Norte para promocionar '5 Big Questions' se animó a dar el biberón a un corderito. Los Duques de Cambridge quieren que sus hijos se sientan tan cerca de la ciudad como del campo, y por eso se esfuerzan en que Jorge, Carlota y Luis estén en contacto con la naturaleza lo máximo posible.
Además de esto, la citada maestra que charló con el Duque de Cambridge reveló a la prensa británica que la pareció un hombre preocupado por el campo y la agricultura en general y por los destrozos provocados por la tormenta Dennis en particular. No hay duda de que el PrÃncipe Guillermo ha heredado esta pasión de su padre, que además de un amante del campo lleva casi toda su vida volcado en causas ecológicas en la medida que se lo permite su rango.