La tragedia que ha asolado la Comunidad Valenciana, así como otros puntos de España, con la terrible DANA ha hecho que los ánimos estén muy encendidos en todo lo que refiere al tema político, pues los damnificados buscan que se diriman las responsabilidades, buscando culpables y tratando de saber por qué nadie les avisó con tiempo. Precisamente por todo esto y ante la desesperación por la situación, se han producido momentos de máxima tensión.
Uno de esos momentos fue con la visita de los Reyes Felipe y Letizia junto al Presidente del Gobierno Pedro Sánchez y el Presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón. A su llegada a Paiporta, multitud de personas indignadas con la situación comenzaron a increparles, fundamentalmente a los respectivos Presidentes, pero quienes se llevaron el peor pato fueron los Reyes, que aguantaron el tipo y recibieron barro y gritos de todo tipo.
Ante esto, han sido muchas las personas que se han pronunciado, pero quizás la más inesperada fue Victoria Federica, quien reposteó en su cuenta de Instagram una fotografía compartida por otra persona con la siguiente frase: " El rey, que no tiene poder ejecutivo, se queda a dar la cara. Pedro Sánchez, que lo tiene, huye. Y así es como se resume todo. Un Rey que sufre por su pueblo y un presidente que lo desprecia".
Malestar general
Lo que en un primer momento puede ser un simple comentario como muestra de cariño y respeto hacia su tío, ha sido objeto de todas las miradas pues está haciendo un posicionamiento político de forma clara, cosa que a los miembros de la Familia del Rey no les conviene demasiado. Precisamente por esto, la Infanta Elena ha decidido darle un toque de atención a su hija, según ha indicado Monarquía Confidencial.
La Infanta le ha hecho consciente de la metedura de pata que ha cometido, pues considera que ha sido imprudente al compartir esas palabras al tratarse de una persona influyente y estar en el foco mediático. Además, su abuelo, el Rey Juan Carlos, también le ha parado los pies a su nieta, quien se ha unido a su hija para advertirle a Victoria Federica de que no debe actuar de esta manera.
El monarca le ha dicho que debe ser prudente en cuestiones como esta, ya que cada palabra salida de tono puede ser interpretada de cualquier manera y despertar críticas feroces que pueden dañar a la Monarquía, incluso aunque los comentarios no sean malintencionados. No cabe la menor duda de que Victoria Federica debe mantenerse al margen de ciertos asuntos consiguiendo así evitar polémicas de este tipo.