Los Reyes de España recibieron la invitación de la Casa Real Danesa para acudir a Copenhague con motivo de las celebraciones por el 75 cumpleaños de la Reina Margarita II de Dinamarca y aceptaron con gusto. Así, Don Felipe y Doña Letizia aterrizaron en la capital danesa este miércoles para asistir a la cena de gala que reunió a la mayor parte de la realeza europea y que ha sido su puesta de largo internacional entre royals.
Los Reyes de España aparecieron en el Gran Salón del Palacio de Christianborg deslumbrando, cogidos del brazo y solemnes, pero también con miradas y gestos de cariño que no pasaron desapercibidos, eclipsando así a otros miembros de la realeza que estuvieron presentes, incluso a la anfitriona y a sus nueras.
Complementando la tiara, la esposa del Jefe del Estado llevó un brazalete 'Art-deco' en oro blanco y diamantes, un diseño de Cartier inspirado en las columnas griegas. Los pendientes de oro blanco y perlas australianas, ya los ha utilizado en otras ocasiones importantes. Un vistoso broche, perteneciente a la Familia Real, fue el que sujetaba su banda de condecoración. Por su parte, el Rey Felipe VI llevó el uniforme de gala de la Armada.
En la cena se pudo ver a la Reina Letizia charlando muy animadamente con las dos personas que se sentaron a su lado, el Gran Duque de Luxemburgo y el Rey Felipe de Bélgica. A buen seguro aprovechó para felicitar a ambos, ya que Enrique I cumplía este jueves 60 años, mientras que el Monarca de los Belgas festejaba el mismo miércoles 55. Sin duda una noche para recordar.