Cristina de Borbón se convirtió en la gran ausente en la celebración del 80 cumpleaños del Rey Juan Carlos, que celebró su onomástica con una comida en La Zarzuela a la que asistieron miembros de la familia Borbón y de la Familia Real Griega. Ni estuvo ella, ni estuvieron sus hijos, a los que sí se echó de menos. En cuanto a Iñaki Urdangarin, nunca se contó con su presencia.
Esa es una razón de peso, pero una revista portuguesa se ha atrevido a decir que el motivo de su ausencia no es otro que la Infanta Cristina se encuentra gravemente enferma y que por eso no pudo ir a la misa. En concreto, la publicación dice que está atravesando una grave depresión, motivo por el cual no fue a La Zarzuela. Si es verdad eso, ¿por qué estuvo en Roma?
Por otro lado, la Familia Real se enfrenta a la publicación de otro libro por parte de una vieja conocida, la periodista Ana Romero, una mujer que por su trabajo sabe bien cómo se manejan los hilos en La Zarzuela. Si anteriormente publicó 'Final de partida', donde narraba qué llevó al Rey Juan Carlos a abdicar, ahora en 'El rey ante el espejo', cuenta cómo han sido los primeros 40 meses como Reyes de España de Don Felipe y Doña Letizia.
El Rey Felipe se parece a su madre
Posiblemente no gustará a Casa Real, que no hará nada, porque de hacerlo quedarían mal, pero lo que sí se sabe es que a la examante de Don Juan Carlos, Corinna zu Sayn-Wittgenstein, le desagrada hasta el extremo de que quiere pararlo. En conversación con Vanitatis, Ana Romero señala en ese sentido: "Estaba acostumbrada a funcionar de una manera. Y ahora ya no se puede. Lo que podría hacer si quiere es querellarse".
Por otro lado, la periodista y escritora dibuja el perfil de ambos reyes, del Jefe del Estado y del Emérito. En el caso del padre señala que es "volcánico, instintivo, rápido. El hijo es frío, reflexivo, tranquilo, más sereno y menos intuitivo". Ya se sabía que Don Felipe se parece mucho más a la Reina Sofía que al Rey Juan Carlos.