Hace ya algunos días que se venía esperando el posado de los Reyes de España, después de que Don Felipe ya se encontrara en Mallorca junto a su madre Doña Sofía y sus sobrinos, con quienes había salido a navegar. No había ni rastro de la Reina ni de sus hijas, la Princesa Leonor y la Infanta Sofía, hasta el 31 de julio por la tarde. La Familia Real aparecía en la puerta del Palacio de Marivent en Palma de Mallorca con una sonrisa.
Los Reyes, la Princesa y la Infanta han posado en tres lugares diferentes y las pequeñas se han mostrado cómplices durante todo el encuentro con la prensa. Don Felipe y Doña Letizia han querido ceder todo el protagonismo a la Princesa Leonor y a la Infanta Sofía, que no solo han posado junto a sus padres, sino que también lo han hecho en solitario.
Han optado por unos looks muy veraniegos y, las dos niñas llevaban la melena suelta dejando a un lado las ya típicas trenzas que solían lucir cada año. La familia ha mostrado mucha complicidad constantemente y en algunos momentos han hablado entre ellos, algo que las cámaras que se encontraban allí presentes han captado. Se aprecia que la Reina Letizia miraba con orgullo a sus pequeñas, que ya no lo son tanto y se comportan como auténticas Princesa e Infanta respectivamente.
Buen rollo con la prensa
El Rey Felipe siempre ha demostrado respetar mucho a los medios de comunicación y, tanto él como la Reina Letizia y sus hijas, saludaron uno por uno a todos los medios y fotógrafos que se encontraban a la espera del ansiado posado. Don Felipe, haciendo gala de su naturalidad, no dudó en dirigirse a los fotógrafos: "¡Vaya día de calor!". El momento del posado tan solo duró seis minutos pero dio tiempo a captar momentos de ternura entre la familia que ha dado por inaugurado el verano como cada año.