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Aunque no es habitual que trasciendan este tipo de asuntos, está claro que teniendo amigos, un estupendo jardín y una fabulosa piscina, es normal que los Reyes Felipe y Letizia den fiestas para sus allegados.
Los Reyes Felipe y Letizia se dan un beso en la entrega del World Peace & Liberty AwardAsí, aprovechando el descanso del fin de semana, Don Felipe y Doña Letizia abrieron su residencia en La Zarzuela para invitar a sus amigos. Todos ellos disfrutaron de un gran día disfrutando de la piscina y de la hospitalidad de los Reyes de España.
Doña Letizia fue la encargada de supervisar todos los detalles para que la fiesta fuera perfecta. Como señala Vanitatis, lo primero de lo que se encargó es de que el menú fuera saludable y de una gran calidad, empezando por un jamón de primera categoría.
Además, la fiesta estuvo regada por vino. Aunque la Reina no bebe alcohol, se encargó de que el vino no faltara en el evento. Eso sí, hubo algún tipo de conflicto, ya que los vinos que se habían elegido para el aperitivo, el almuerzo y el postre no le gustaban. Ella quería algo mejor para sus invitados, así que cambió la elección y apostó por un vino de Ourense de unos 60 euros la botella.
La bodega de los Reyes Felipe y Letizia
Los Reyes Felipe y Letizia tienen una muy buena bodega en su residencia de La Zarzuela. Fue David Rocasolano, primo de Doña Letizia, el que desveló en su libro 'Adiós, princesa' que el Monarca, muy aficionado a la enología, le enseñó su bodega, un pequeño secreto que quiso compartir sin saber que algún día lo contaría en un libro.
