Los Reyes prosiguen con su tour por España para conocer de cerca cómo se ha vivido en coronavirus en los diferentes enclaves del territorio nacional. Después de pasar por las Comunidades de Canarias, Baleares y Andalucía, su cuarta parada ha sido en Castilla-La Mancha, en Cuenca concretamente.
Una ciudad especialmente importante para ellos puesto que allí fue donde empezaron a finales de mayo de 2004 su luna de miel. Una luna de miel que estos días está de nuevo 'de actualidad' puesto que, además de haberse conocido los detalles de todos los sitios que visitaron, también se ha sabido que costó alrededor de 500.000 euros, dinero que habría pagado el Rey Juan Carlos y su amigo íntimo Josep Cusí.
Pero los Reyes no tenían la mente puesta en los diversos escándalos que han surgido en la últimas semanas. Para ellos lo realmente importante en este instante es que la población sienta su cercanía y poder conocer de primera mano las secuelas que el coronavirus ha dejado en la población en todos los sentidos.
Los Reyes han repetido su paseo de recién casados
De ahí que, además de las diferentes visitas que tienen marcadas en su agenda, Don Felipe y Doña Letizia le estén también dedicando unos minutos a pasear por las calles de los diferentes lugares que visitan, charlando con los ciudadanos que se encuentran a su paso. Algo que han vuelto a hacer en Cuenca, recorriendo esas aquellas del casco antiguo por las que hace 16 años pasearon como recién casados.
Un día en Cuenca en el que también han visitado la granja-escuela 'El Terminillo' de la Asociación para la Atención a Personas con Discapacidad Intelectual o del Desarrollo y sus Familias (ASPADEC), conociendo la importantísima labor que allí se realiza desde hace 40 años, así como el Museo de Arte Abstracto Español situado en las Casas Colgadas.