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No se puede decir que la agenda oficial en el extranjero de los Reyes Felipe y Letizia haya sido escasa. Los Viajes de Estado, los de mayor relevancia institucional, llegaron a 10 entre la subida al trono de Felipe VI el 19 de junio de 2014 y la irrupción de la pandemia. Precisamente esto trastocó los planes de al menos un Viaje de Estado a Estados Unidos que evidentemente no pudo producirse en abril de 2020. Los Reyes retomaron su actividad presencial en cuanto fue posible, pero los viajes internacionales se quedaron aparte a excepción del paso de la Reina Letizia por Honduras para un viaje de cooperación en diciembre de 2020, así como el traslado de Felipe VI a Bolivia en noviembre de 2020 para estar presente en la toma de posesión de Luis Arce como Presidente del país.
Así, hasta el 25 de marzo de 2021 no se retomaron los viajes al extranjero conjuntos. Ese día por la mañana, Don Felipe y Doña Letizia se desplazaron al aeropuerto Adolfo Suárez-Madrid, Barajas, donde tuvo lugar la despedida oficial en el pabellón de Estado antes de tomar el avión que les dejó lo más cerca posible del país de los Pirineos, que no tiene aeropuerto propio. Fue ahí cuando se pudo apreciar el look elegido por la Reina, que ha optado por volver a ponerse un vestido granate de Massimo Dutti que había lucido el 16 de febrero de 2021 cuando visitó la exposición 'Concepción Arenal. La pasión humanista 1820-1893' en la Biblioteca Nacional en Madrid.
Macron, presente a través de su representante
A mediodía, los Reyes ya se encontraban en Andorra para este decimoprimer Viaje de Estado de Don Felipe y Doña Letizia. Tiene además la peculiaridad no solo de que con él se recuperan las visitas al más alto nivel y los viajes al extranjero conjuntos de los Reyes, sino que se trata de la primera vez que un Monarca español visita el país vecino de forma oficial. Como anunció Casa Real, la visita se ha producido por la presencia de Andorra en la XXVIII Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno que se celebrará el 21 de abril y donde va a participar Felipe VI.
Por todo ello, y a pesar de la pandemia y la brevedad de la estancia, que es de dos días, el viaje tiene una enorme relevancia y como tal se ha tratado a tan ilustres visitantes. La recepción oficial se produjo en la Casa de la Vall, donde los Reyes fueron arropados por los copríncipes de Andorra. El país tiene dos jefes de Estado, uno es el Arzobispo de Urgell y el otro es el Presidente de la República, una peculiaridad del Principado de Andorra. Joan-Enric Vives estuvo presente, pero no así Emmanuel Macron, que envió en su lugar a Patrick Strzoda, que actúa como representante del Presidente de la República de Francia en el Principado de Andorra.
El comienzo de la visita ha estado marcado por saludos y recibimientos oficiales, teniendo el habitual corte más institucional que se produce en las Visitas de Estado. Sin embargo, ya en el primer día de visita, la Reina se reúne en el Andorra Park Hotel con la Ministra de Educación de Andorra, Ester Vilarrubla, con la que ha querido tratar el modelo de inclusión de alumnos con diversidad funcional en Andorra. Posteriormente, a Don Felipe y Doña Letizia se les espera en la sede del Gobierno antes de cerrar el día con una cena en su honor ofrecida por los copríncipes de Andorra.