El Rey Juan Carlos fue uno de los testigos de excepción que pudo seguir desde el estadio de Cardiff la final de la Champions 2017, que se decantó a favor del Real Madrid por cuatro goles a 1, dejando a la Juventus desolada. Su Majestad se mostró más campechano que nunca antes como después del encuentro.
Antes del pitido inicial, el Rey Emérito, junto a la Presidenta de la Comunidad de Madrid Cristina Cifuentes y a la Alcaldesa de Madrid Manuela Carmena, mantuvo una pequeña charla en directo con Josep Pedrerol, que estuvo toda la tarde haciendo un programa especial para La Sexta.
El periodista le comentó que, a diferencia del año pasado, en esta ocasión no ha querido perderse el partido. Entonces recibió una contestación totalmente inesperada: " Este año he venido porque me ha mandado mi hijo, aunque aquí estoy encantadísimo con la Presidenta y mi Alcaldesa".
Fue a celebrar a Sergio Ramos
Tras esa curiosa contestación entre una sonrisita, el Rey Juan Carlos comentó que el Real Madrid tendría que luchar mucho si quería llevarse la victoria: " Tenemos que pelear. En el otro lado tenemos a Buffon ", comentó antes de añadir que quería que ganasen los de Zidane porque "es español".
Y una vez que se produjo el pitido final y que, efectivamente, ganó el equipo español, quiso felicitar personalmente a los jugadores. Ramos fue uno de los afortunados a los que vio en privado -el resto lo hicieron en el vestuario- y el futbolista quiso mostrarlo a través de sus redes sociales haciéndose un selfie con él: " Hay muchas felicitaciones, REALES pocas. ¡Gracias por venir al doping a saludarme, Majestad! ".