Haciendo gala de su discreción habitual y de su poca afición por los grandes festejos, el Rey Felipe VI ha querido celebrar su 51 cumpleaños como un día más en su agenda y por ello se ha trasladado, casi por sorpresa, a un lugar con gran significado e importancia.
En calidad de mando supremo de las Fuerzas Armadas españolas, Don Felipe ha viajado este 30 de noviembre hasta la capital de Irak para comprobar de primera mano el desarrollo de la Operación Alfa-India que el ejército desarrolla en Bagdad con el objetivo de luchar contra el Daesh.
Acompañado por la Ministra de Defensa (Margarita Robles) y vestido de uniforme militar, el Monarca inició la jornada con un encuentro formal en el Bagdad Diplomatic Support Center y luego se trasladó a una de las bases del operativo para dar las gracias personalmente a los miembros del contingente por su trabajo: " Sois un gran orgullo para todos los españoles ".
A la vuelta, celebración con la familia
Se trata de un viaje que no estaba previsto de antemano en la agenda oficial de la Casa Real Española pero que sin duda tendrá un efecto positivo en la imagen de la institución. En cualquier caso, lo único seguro es que en cuanto vuelva de Bagdad, Don Felipe podrá disfrutar de una celebración mucho más íntima en compañía de su familia.