Los actos por la Jura de la Constitución de la Princesa Leonor contaron con cuatro discursos. El primero de ellos corrió a cargo de Francina Armengol, Presidenta del Congreso y la encargada de estar junto a la Princesa de Asturias en el momento más importante de la jornada en el que alcanzó su mayoría de edad, cuando prestó juramento ante un ejemplar de la Constitución de 1978.
La Presidenta del Congreso alabó la diversidad de España, citó versos en valenciano, gallego y vasco y señaló que "este acto histórico muestra el compromiso de la Princesa Heredera con nuestra ciudadanía. Porque el juramento de Doña Leonor de Borbón y Ortiz es la expresión pública del respeto a nuestra Constitución y del respeto al resto de nuestro ordenamiento jurídico". Además, describió a la Princesa de Asturias como una mujer joven que es "cercana al sentir mayoritario de su generación".
Finalizado el Juramento en el Palacio de Las Cortes, la Familia Real y las autoridades se trasladaron al Palacio Real para la imposición a la Princesa Leonor del Collar de la Orden de Carlos III, un acto en el que Pedro Sánchez, Presidente del Gobierno, también pronunció unas palabras: "Es un honor para el Gobierno de España entregaros esta condecoración en un día tan significativo para la vida de vuestra Alteza y para la historia de España. Contad con la lealtad, el respeto y el afecto del Gobierno".
Tras la imposición del Collar de la Orden de Carlos III tomó la palabra la Princesa de Asturias, que pidió a los españoles su confianza y reafirmó su compromiso con España. Y tras finalizar esta ceremonia y el besamanos, la Familia Real y representantes de las autoridades del Estado pasaron al comedor de gala del Palacio Real, donde tras sentarse cada uno en su lugar, el Rey ofreció el último discurso de la celebración pública.
Un discurso con referencias personales a Leonor
"Junto a la Reina, la Princesa de Asturias y la Infanta Sofía, sean todos muy bienvenidos al Palacio Real en este día tan relevante para nuestra historia y lleno de significado para España, en el que hemos cumplido con nuestras previsiones constitucionales. El juramento de la Constitución de la Princesa de Asturias ante las Cortes Generales es la solemne expresión del compromiso de quien encarna la continuidad de nuestra Monarquía Parlamentaria con nuestros principios democráticos y valores constitucionales", comenzó el Jefe del Estado.
"Hoy quiero recordar las palabras que me dirigió, antes de prestar mi propio juramento como Príncipe Heredero hace casi 38 años, el entonces Presidente del Congreso de los Diputados Don Gregorio Peces-Barba. Dijo entonces: " con el juramento que vais a prestar estáis simbolizando vuestro sometimiento al Derecho, vuestra aceptación del sistema parlamentario representativo que nuestra Constitución establece, vuestro compromiso de servicio a las instituciones y a los ciudadanos y vuestra lealtad al Rey. Aquellas palabras, que han sido una guía para el ejercicio de mis funciones a lo largo de todos estos años, trascienden en el tiempo y la historia y, con ellos, también a las generaciones.", añadió el Monarca.
Fue entonces cuando se dirigió directamente a su hija: " El sometimiento al Derecho constituye, Leonor, una exigencia para la Corona y para todas las instituciones del Estado. La observancia de la ley, el respeto a la independencia y a la separación de poderes y la vigencia del Estado de Derecho son los pilares esenciales de toda democracia representativa y, por ello, la garantía de la libertad y de los derechos de los ciudadanos. La aceptación del sistema parlamentario, Leonor, supone el reconocimiento de las Cortes Generales como la institución que, con plena legitimidad, representa al pueblo español, en quien reside la soberanía nacional. Un pueblo del que emanan todos los poderes del Estado y que ostenta el poder de decisión sobre todos los asuntos de la vida colectiva de nuestro país".
"El compromiso con las instituciones significa la plena entrega y dedicación a los intereses generales que representan, al servicio de los ciudadanos como la razón de ser, y el fundamento, de cualquier responsabilidad constitucional. Y la lealtad al Rey lo es también a la institución y a lo que la Corona simboliza: la unidad y permanencia de España. Han pasado muchos años desde aquella ocasión y, aunque las circunstancias históricas sean distintas, me gustaría que esas palabras del Profesor Peces-Barba también acompañen siempre a quien es la Heredera y Princesa de Asturias, de Girona y de Viana. Porque en ellas encontrará las razones de su responsabilidad. Su deber, como también el mío, es cumplir y respetar nuestra Constitución. Y ese deber prevalece en todo momento sobre cualquier otra consideración", declaró Don Felipe.
Aquí se puso más personal: " Querida Leonor. No estarás sola en tu camino. En tu familia encontrarás el necesario apoyo más personal, y el conjunto de los españoles, a los que te debes, sabrá reconocer tu entrega y dedicación con su aliento y afecto. Tú formas parte y representas a una nueva generación que, como las que nos han precedido, tendrá sus propios ideales, su modo de ver y entender la vida, su visión del mundo. Y tendrá también sus propios retos, que os exigirán siempre la mayor preparación. Conocer cada día más nuestra historia, y valorar la diversidad y riqueza cultural y natural de nuestro país sin duda os ayudará en ese empeño ".
"Debéis saber que la democracia y la libertad no se construyen de un día para otro, sino día tras día, y precisan de un cuidado continuo y de una mejora permanente. Vosotros tendréis esa responsabilidad: la de seguir construyendo España, adaptándola a un mundo en plena transformación. Y en esa tarea, apasionante y siempre inacabada, debéis tener presente los principios y valores que nos unen y que nos han unido a lo largo de nuestra historia reciente. Los principios y valores de la Constitución que acabas de jurar. Esa es la manera de encarar el futuro con confianza; una confianza que te debe acompañar a ti Leonor y, por supuesto, a las próximas generaciones", manifestó el Rey.
Para terminar, deseó a su hija un feliz cumpleaños y pidió un brindis en su honor : "Tu madre y yo, tu familia y todos te damos la enhorabuena por tu jura de la Constitución; también por haber recibido las Medallas del Congreso y Senado, y finalmente el Collar de la Real y Distinguida Orden de Carlos III, la máxima condecoración civil del Estado. Y que no se me olvide, con todo cariño te deseamos feliz cumpleaños. Os invito a brindar por ella ¡Larga vida y acierto a la Princesa de Asturias! ", exclamó el Rey, ante lo que todo el mundo levantó y chocó sus copas y bebió el cava servido en ellas. Bueno, todo el mundo salvo la Reina Letizia, que no bebe alcohol y solo se mojó los labios.