Enero de 2024 fue muy difícil para la Familia Real Británica, con la operación de próstata de Carlos III y la intervención abdominal a la que tuvo que someterse Kate Middleton. Lo peor estaba por llegar porque pocas semanas después se suicidó Thomas Kingston, marido de Lady Gabriella Windsor, y los médicos descubrieron que el Monarca tenía cáncer, lo mismo que lamentablemente ocurrió con la Princesa de Gales.
Afortunadamente, Kate Middleton ha ido mejorando y en septiembre de 2024 anunció que había terminado su tratamiento de quimioterapia, y aunque no estaba fuera de peligro, se sentía mucho mejor y poco a poco empezó a dejarse ver mucho más. En el caso de Carlos III, siempre estuvo muy presente y fue muy transparente con respecto a su enfermedad, aunque en su caso, el tratamiento se ha ido alargando.
Enfermedad controlada
Después de que tuviera lugar el tradicional almuerzo prenavideño en Buckingham Palace, y antes de poner rumbo a Sandringham para una multitudinaria Navidad que sin embargo va a contar con varias ausencias, se ha conocido que el año que termina no se lleva con él el tratamiento contra el cáncer.
El Rey Carlos III en su discurso por el Día de la Commonwealth 2024Fuentes de la Casa Real Británica han señalado que el Monarca seguirá necesitando tratamiento en 2025. Eso sí, hablan de que Carlos III está muy controlado y que todo parece que está avanzando en una dirección positiva. " Su tratamiento ha ido avanzando en una dirección positiva y, como es una enfermedad controlada, el ciclo de tratamiento continuará hasta el próximo año ", indicaron las fuentes a Sky News. Nuevamente se indica así que las cosas parecen ir bien para el Monarca, aunque no se puede dar una fecha para el final del tratamiento, ni tampoco sobre una curación.
Y aunque la edad, la enfermedad y el tratamiento le pesan, Carlos III sigue queriendo continuar con su labor como Jefe del Estado, y no solo con tareas de despacho. Tras un 2024 en el que logró incluso realizar una gira oficial que le llevó a Australia y Samoa y recibir las Visitas de Estado del Emperador de Japón primero, y del Emir de Catar después, planea un 2025 con grandes viajes y con un amplio programa de actos oficiales.
