La triste reunión de los Reyes Juan Carlos y Sofía frente al feliz reencuentro de Felipe y Letizia con Jaime de Marichalar

Los Reyes Juan Carlos y Sofía han vuelto a dejarse ver juntos. El mismo día en el que otros Reyes que lo fueron y ya no lo son, Alberto y Paola de Bélgica, se dejaron ver juntos con motivo de una misa en recuerdo a los miembros de la Familia Real Belga fallecidos, los padres del Rey de España también aparecieron en público por otro motivo igualmente triste.

La muerte de Plácido Arango, fallecido el 16 de febrero de 2020 a los 88 años, les llevó al tanatorio de San Isidro de Madrid. Don Juan Carlos y Doña Sofía quisieron estar cerca de la familia en estos momentos de tanto dolor y comunicaron su pesar en su nombre y en el que los Reyes Felipe y Letizia. La triste casualidad quiso que en ese mismo lugar se velara a Cristina de Borbón tres días antes. La aristócrata era hija del Duque de Sevilla, primo de Juan Carlos I, y falleció a consecuencia de un accidente el 13 de febrero de 2020 a los 44 años.

Don Juan Carlos y Doña Sofía habían expresado previamente sus condolencias, al igual que Don Felipe y Doña Letizia, pero en su caso sí quisieron acercarse hasta el tanatorio. Allí pudieron despedirse de quien fue Presidente de la Fundación Príncipe de Asturias entre 1987 y 1996.

Encuentro entre antiguos cuñados

Por otro lado, los Reyes de España habían tenido un acto ese mismo día. La entrega de los Premios Nacionales de Investigación 2019 les llevaron al Palacio Real de El Pardo para galardonar a Valentín Fuster, Ángela Nieto, Susana Marcos, Manuel Francisco Carreiras Valiña y Mercedes García-Arenal.

Uno de los invitados al acto fue Jaime de Marichalar. El aristócrata quiso apoyar al cardiólogo Valentín Fuster, Premio Nacional Gregorio Marañón de Medicina por sus aportaciones a la investigación, a la prevención y al diagnóstico y tratamiento de la patología cardiovascular. Fuster trató a Marichalar cuando sufrió una isquemia cerebral en 2001.

La Infanta Elena y Jaime de Marichalar se trasladaron a Nueva York con sus hijos para que el aristócrata trabajara en su recuperación. Lo hizo en el hospital Monte Sinaí, donde Fuster dirigía la unidad de cardiología y ayudó mucho a Marichalar. Después le apoyó en otro momento clave, por lo que el hijo del VIII Conde de Ripalda ha querido estar presente en un día tan importante.

Allí pudo ver también a los que fueran sus cuñados. La relación entre la Infanta Elena y Jaime de Marichalar es inexistente, pero con Doña Letizia sí hay cierto contacto. Mientras Don Felipe siempre tuvo predilección por Iñaki Urdangarin, la entonces Princesa de Asturias conectó más con el padre de Froilán y Victoria Federica. Ambos se apoyaron mutuamente durante los 3 años en los que fueron familia y una vez se disolvió el vínculo de cuñados se han visto en algunas ocasiones. La más importante para Marichalar fue cuando murió su madre. La Reina Letizia acudió personalmente a apoyar a su excuñado en un momento tan complicado y se le vio charlando con él, demostrando así la buena relación entre ambos.