Las hijas de los Reyes ya se habían dejado ver en su posado oficial de verano donde además contaron cómo se lo habían pasado en el campamento al que viajaron a Estados Unidos. Las cuatro se han dejado ver de una manera muy distinta a la que tienen acostumbrada, y parece que la relación entre las reinas está en un buen momento después de trifulca que tuvieron en una iglesia cuando la Reina Sofía intentó fotografiarse con sus nietas y la Reina Letizia se lo impidió.
Armonía en la familia
Muy sonrientes se dejaron ver por un mercado, incluso tuvieron tiempo para mirar las ofertas del día de una pescadería de la zona. El Mercado de l'Olivar se llenó de curiosos en una estampa totalmente atípica de la Familia Real Española. La Reina Sofía, para hacer frente a la ola de calor que azota a la Península Ibérica llevaba un ventilador de mano con el que refrescarse durante todo su paseo. Y además iban provistas de gafas de sol, tanto las reinas como las niñas, que fueron agarradas de la mano de su abuela y se notó que en la familia vuelve a respirarse tranquilidad en la medida de lo posible.