Doña Sofía acudió a este lugar, donde visitó las instalaciones y se mostró muy cariñosa con los animales.
El interés de la Reina Sofía por luchar a favor de la protección de los animales es ya conocida. Por ello acudió este martes al Centro de Adopción de Animales Abandonados de la Asociación Nacional Amigos de los Animales (ANNA) en la localidad madrileña de Valdetorres de Jarama.Allí descubrió una placa conmemorativa con su nombre y recibió los aplausos de los presentes, entre los que estuvieron el secretario de Estado de Medio Ambiente, Federico Ramos, el alcalde de Valdetorres del Jarama, José Manuel Acevedo, y la presidenta de la ANAA, Pilar Cañizo.
Posteriormente Su Majestad recorrió las instalaciones del centro, entre ellas la clínica, los quirófanos, los edificios de acogida de cachorros y felinos y las jaulas y patios donde se encuentran los animales que son recogidos y cuidados por el Centro de Adopción de ANAA, un lugar pensado para que estén temporalmente, pues el objetivo es que encuentren una familia que les adopte.
La Reina Sofía siente debilidad por los perros
La Reina quiso fotografiarse con un burro, a quien tocó mostrando su ternura, y acarició a los perros abandonados del centro. También cogió en brazos a un diminuto gato y jugó con otro felino, dejando patente una vez más su profundo amor por los animales, una pasión que data desde su niñez en Grecia.La Reina adora sobre todo a los perros y no duda en acompañarse de ellos en Zarzuela, donde tiene varios, siendo el último de ellos Paquita, una perra que adoptó en la Feria del animal de compañía el pasado mayo.