Todo parece indicar que habrá que esperar hasta el 19 de mayo para poder descubrir el secreto mejor guardado de la gran boda. Sin embargo, hay una persona que tendrá la suerte y el honor de ser de las primeras en ver el vestido antes que el resto del mundo: la Reina Isabel II.
Tal y como ha señalado la periodista Emily Nash en una reciente entrevista, existe una tradición en la Familia Real según la cual todas las novias acostumbran a enseñar su vestido a la monarca días antes de la ceremonia: "Sé que novias como Autumn Kelly, que se casó con Peter Phillips, o la Duquesa de Cambridge hicieron eso. Si el vestido está en Windsor, es una agradable cortesía mostrárselo a Su Majestad antes del gran día".
Dos vestidos a falta de uno
Aunque se desconoce todavía el diseñador definitivo del vestido de novia, diversos medios apuntan a que Meghan Markle imitaría a su cuñada, la Duquesa de Cambridge, al elegir dos vestidos para el gran día. Así lo asegura la revista Vanity Fair: "Tendrá dos vestidos, uno para la ceremonia y otro para la noche. El plan es que cambie después de la ceremonia para que pueda pasar la noche con algo glamuroso y menos restrictivo".