Aunque la Reina Isabel no puede expresar opiniones o sentimientos, pero sí puede dejar claro lo que piensa a través de gestos.
No han sido buenos tiempos para la Familia Real Británica en 2019, ni tampoco en 2020. Aunque no ha sido solo por el Príncipe Harry y Meghan Markle, por su proyección mediática y por el impacto de su decisión sí es cierto que el Sussexit ha acaparado todas las miradas. No hay que olvidar que hay cuestiones más graves para la dinastía como el Caso Epstein, pero en ese caso la Reina Isabel siempre ha cerrado filas en torno al Duque de York a pesar de que se le instó a que abandonara los actos oficiales.
Con el Príncipe Harry y Meghan Markle ha tenido sus más y sus menos, sin embargo parece que les ha perdonado definitivamente tras haber pasado una etapa de decepción con ellos por su decisión de dejar de ser royals senior, lo que derivó en un acuerdo de Sussexit duro con el que han tenido que abandonar la Casa Real Británica y no pueden usar la palabra royal para fines privados ni recibir fondos de los Mountbatten-Windsor.Como la Reina no puede expresar públicamente lo que piensa o siente, y menos en estos casos, son los gestos los que denotan su parecer. Si en otoño de 2019 retiró la foto de los Duques de Sussex de la sala de audiencia de Buckingham Palace en pleno revuelo por sus declaraciones en el documental 'Harry&Meghan: An African Journey' y tampoco tuvieron espacio en la sala en la que se emitió el discurso navideño, antes de que acabe el invierno de 2020 han regresado.
Con motivo de la audiencia al profesor Mark Compton, Lord Prior de la Orden de San Juan,al que por cierto saludó estrechándole la mano sin llevar guantes, algo extraño teniendo en cuenta las recomendaciones por el coronavirus, se vio un detalle que muestra el perdón de la Monarca. En la mesilla en la que siempre hay retratos familiares que se van cambiando se ha podido comprobar que los Sussex han vuelto. Eso sí, les ha puesto detrás de unas flores para que no fuera tan evidente.La buena relación entre la Reina Isabel y el Príncipe Harry
Si las imágenes sirven para saber cómo están las relaciones en la Familia Real Británica, no hay duda de que su nieto y la esposa de este vuelven a estar bien con la Reina, si es que alguna vez llegaron a estar mal. En los primeros comunicados sobre el Sussexit se recalcó que el Príncipe Harry, Meghan Markle y Archie eran y siempre serían una parte muy importante de la Familia Real, lo que quedó todavía más claro cuando el Duque de Sussex regresó a Reino Unido tras el Sussexit y mantuvo un almuerzo privado con Isabel II en Windsor Castle.
La despedida de los Duques de Sussex de la Casa Real Británica se compuso de una serie de actos públicos, pero también fueron a la misa dominical el 8 de marzo de 2020 en la Capilla Real de Todos los Santos en Windsor Great Park. Lo hicieron para acompañar a la Reina, un gesto de que tanto el Príncipe Harry como Meghan Markle quieren estar estando cerca de la Monarca sean o no miembros de la Casa Real Británica. Para el Príncipe Harry, Isabel II siempre será su querida abuela, igual que para la Jefa de Estado, el Duque de Sussex será siempre su adorado nieto.