Los británicos no pueden ocultar su preocupación por el estado de salud de la Reina Isabel II, de la que se están dando noticias que no están gustando demasiado. Hace tan solo unos días se conocía la noticia de que la Reina de Inglaterra había tenido que ser ingresada en el hospital durante un corto periodo de tiempo por problemas de salud. Lo cierto es que no fue nada grave, según se pudo saber, pero la edad de Isabel II es la que es.
A sus casi 95 años, la Reina Isabel II retomó su agenda presencial después de la pandemia y se la pudo ver en multitud de compromisos profesionales. Lo cierto es que a la Reina se la vio muy vital y sin aparentes signos de cansancio, pero su edad es avanzada y el cuerpo juego malas pasadas. Precisamente por esto se produjo el mencionado ingreso y se han tomado una serie de medidas que ha tenido que acatar.
La Reina Isabel II tuvo que cancelar su viaje a Irlanda del Norte y tampoco puede salir a dar sus largas caminatas junto a sus perros por Windsor por prescripción médica. A esto se le suma la prohibición de seguir montando a caballo como venía haciendo a pesar de su avanzada edad. No cabe duda de que tiene que ir cambiando sus hábitos de vida y parece que va para largo.
Dos semanas más de parón
Según ha anunciado el Palacio de Buckingham en un breve comunicado, el descanso obligado de la Reina Isabel II durará al menos dos semanas más. Esto hace pensar que la salud de Isabel II está ligeramente resentida y que necesita un parón extenso para coger fuerzas de nuevo. Está claro que van a llegar muchos cambios a la vida de la Reina Isabel II, quien necesita descansar y llevar una vida más relajada.
Según se está comentando, Isabel II podría no volver a realizar compromisos en solitario para que, en caso de cancelación, haya un miembro de la Familia Real Británica que esté presente en dicho acto. Además, se mirará con lupa cualquier compromiso presencial al que tenga que acudir para ver si le permiten acudir o no, por lo que hará mucho más trabajo en el despacho que fuera.