En el Palacio trabajan a diario unas 500 personas, por lo que la Reina está altamente expuesta a un posible contagio. Por el momento ninguno de sus empleados han dado positivo y ni tienen síntomas del virus, pero mucho mejor prevenir cuando todavía se está a tiempo.
"El Palacio de Buckingham está en el centro de Londres y también tiene más personal que otras áreas, por lo que se considera un lugar mucho más peligroso. Todavía no ha habido ningún miedo específico o prueba positiva, pero nadie quiere correr riesgos", ha asegurado una fuente a The Sun.
La agenda de la Reina, cancelada
De ahí que sus asesores haya tomado la determinación de cancelar por completo toda su agenda sin fecha prevista para retomarla, trasladando a la Reina desde el Palacio hasta su residencia de Windsor, mucho más tranquila y con menos personal.