La Monarca envió un mensaje al Presidente de China relativo al coronavirus a través del Príncipe Andrés, apartado de los actos oficiales por el Caso Epstein.
Sea porque tantos años en el Trono pesan, por no tener a quien recurrir o por amor de madre, la Reina Isabel no para de equivocarse con el Duque de York. La Monarca parece no entender que el Príncipe Andrés no es tan honorable como él mismo dijo que era en su fatídica entrevista con BBC en noviembre de 2019 que le costó ser apartado de los actos oficiales. Si por un lado no ha sido lo suficientemente firme con él e incluso le ha mostrado su apoyo dejándole que le acompañe a la misa de Sandringham, por otro ha incurrido en un error al enviarle de emisario.
El Duque de York es un hombre libre, ya que aunque no está cooperando como debería en la investigación del Caso Epstein, no pesan cargos contra él, no ha sido juzgado, ni condenado. Eso quiere decir que puede acudir a las cenas privadas que quiera y donde se le invite, aunque quien lo haga sea todo un embajador. Lo que no puede es enviar un mensaje oficial de la Reina al Presidente de China, o si lo hace, que no trascienda.Lo que ha ocurrido es que el embajador de China en Reino Unido, Liu Xiaoming, le invitó a la celebración del Año Nuevo Chino. El Príncipe Andrés fue acompañado nada más y nada menos que de su exmujer, Sarah Ferguson, con la que tiene una relación que nada tiene que ver con la de unos divorciados cualquiera, así como con su hija mayor, la Princesa Beatriz, y el prometido de esta, Edoardo Mapelli Mozzi.
El encargado de desvelarlo ha sido el diplomático, que a través de su cuenta de Twitter ha mostrado una imagen que además de a los York enseña su enorme poder. Pero una cosa es ir a la cena y otra es que lleva mensajes oficiales en nombre de la Reina: "Su Majestad la Reina ha enviado un mensaje alentador al Presidente Xi y al pueblo chino: 'En el momento crítico de combatir el coronavirus, expreso mi sincera simpatía por el pueblo chino y rezo por el rápido control y la victoria sobre el virus'. Fue transmitido por el Duque de York", señaló el embajador. "Mi esposa y yo invitamos al Duque de York y su familia a nuestra residencia y celebramos el Año Nuevo Chino. Su entusiasmo por China y su contribución a la relación China-Reino Unido es muy apreciado", ha finalizado Liu Xiaoming.El triunfo de Beatriz de York
Al final los York no pueden quejarse y quizás se lo deban al Sussexit. La Reina Isabel no desea apartar a su tercer hijo y a su familia pese a la idea del Príncipe Carlos de acortar el número de miembros de la Casa Real Británica en activo. Además, su salida deja huecos que es necesario cubrir y que quizás no puedan asumir los royals senior.
Cuestiones oficiales aparte, la Princesa Beatriz puede presumir además de haber obtenido el permiso de la Reina no solo para casarse en la Capilla Real de St James Palace, el mismo lugar en el que contrajeron matrimonio la Reina Victoria y el Príncipe Alberto y donde ella fue bautizada, sino de celebrar su recepción nupcial en Buckingham Palace y que sea el Príncipe Andrés el que le lleve al altar. Sin duda, un privilegio para una nieta especial a pesar de que su posición en la línea de sucesión es menor.