A pesar de que el país afrontaba una etapa muy difícil de posguerra, muchos ciudadanos salieron a las calles para celebrar aquella boda definida por Winston Churchill como "un toque de color en el duro camino que debemos recorrer". La ceremonia se celebró en la Abadía de Westminster, seguida de un banquete ofrecido en Buckingham Palace. Por supuesto hubo saludo desde el balcón principal de la residencia real para agradecer a la ciudadanía el haberse echado a las calles en un día tan especial.
Recuerdo al pasado y guiño al futuro
Comenzaba así una vida en común marcada por un pronto reinado que se ha extendido en el tiempo más que ningún otro en la historia de Reino Unido, así como por una longevidad de ambos que ha permitido que hayan superado con creces las Bodas de Titanio. De hecho, el 20 de noviembre de 2020 han cumplido 73 años de matrimonio, y han querido celebrarlo publicando una foto oficial.
La Monarca y el Príncipe Felipe han posado para el objetivo de Chris Jackson desde el Oak Room de Windsor Castle, donde permanecen en un segundo confinamiento. En la imagen se les ve sonrientes y relajados mientras observan el regalo que han recibido por haber logrado cumplir 73 años de casados.
Se trata de una tarjeta pintada y decorada por tres de sus bisnietos, el Príncipe Jorge, la Princesa Carlota y el Príncipe Luis, que por mediación de los Duques de Cambridge quisieron tener un detalle con sus bisabuelos en un día tan especial. Así, se pusieron manos a la obra para colorear un 7 y 3 y realizar dibujos con los que obsequiar a tan longeva pareja.
El Duque de Edimburgo, que sostiene la tarjeta, tiene tan buen aspecto como de costumbre a pesar de que se acerca al siglo de vida. No menos animada se encuentra la Reina, que además ha dejado claro que no tiene pensado abdicar a través del anuncio de los festejos que tendrán lugar en 2022 con motivo de sus 70 años de reinado.
Como en las Casas Reales los símbolos lo son todo, la Monarca ha querido hacer un guiño a sus primeros momentos de matrimonio con el Príncipe Felipe colocándose el broche de crisantemo de zafiros y diamantes que le pertenece desde 1946 y que se puso para la sesión de fotos que se tomó de los recién casados al inicio de su luna de miel en los terrenos de Broadlands, residencia de Lord Mountbatten, tío carnal del Duque de Edimburgo y tío tercero de la entonces Princesa Isabel, y un hombre muy importante en la vida de ambos y que también lo fue en la del Príncipe Carlos.