La Reina Isabel tiene la costumbre de viajar a Sandringham antes de Navidad, permaneciendo allí durante todo el mes de enero. Desde su finca de Norfolk despacha todos sus asuntos como Jefa de Estado y cumple con compromisos oficiales. Uno de ellos es su visita anual al Instituto de la Mujer en West Newton Village Hall
Se esperaba que la Monarca acudiera a una cita con la que cumple desde su juventud, sin embargo avisó media hora antes de asistir que le resultaba imposible salir de Sandringham al no sentirse con fuerzas.
De acuerdo con Daily Mail, el motivo real de la cancelación del acto de la Reina es un resfriado que afortunadamente es leve. Sin embargo, debido a la avanzada edad de Isabel II y al mal tiempo propio de la estación invernal, se ha optado por la precaución. La Reina se sentía además con pocas fuerzas y ánimo, así que lo mejor ha sido que se haya quedado descansando.
Tiempos delicados para la Familia Real Británica
No corren buenos tiempos para la Familia Real Británica, al menos para parte de ella. La Reina ha tenido que pilotar el Megxit y con gran dolor ha impuesto enormes condiciones al Príncipe Harry y Meghan Markle para abandonar la Casa Real Británica. El Príncipe Carlos, gran perdedor de esta situación, se siente muy decepcionado con su hijo, mientras que el Príncipe Guillermo ha acercado posturas con su hermano.
Además, la salud de la Reina ha terminado resintiéndose, al igual que la del Duque de Edimburgo. El longevo consorte fue hospitalizado antes de la Navidad de 2019 por una afección preexistente. No tardó en volver a Sandringham, donde vive retirado desde que se apartó de los actos oficiales en 2017. A pesar de su vitalidad, fortaleza y energía, su estado es delicado.