La Reina Isabel se ha tomado dos semanas de descanso por recomendación médica, pero estaba previsto que el domingo 14 de noviembre de 2021 reapareciera para participar en las celebraciones con motivo del Día del Armisticio, que marca el final de la Primera Guerra Mundial y se trata de un recuerdo a los fallecidos en batalla. Pero la tan esperada aparición no ha sido posible, porque justo horas previas al evento, el Palacio de Buckingham ha anunciado que la Reina no presidirá este acto desde el balcón del Ministerio de Asuntos Exteriores tal y como estaba previsto.
"La Reina, tras sufrir un esguince de espalda, ha decidido esta mañana, con gran pesar, que no podrá asistir al Servicio del Domingo del Recuerdo de hoy en el Cenotafio. Su Majestad está decepcionada por no poder asistir al servicio ", se ha podido leer en el comunicado emitido por la ausencia de la Reina.
Eso sí, asistirán otros miembros de la Familia Real Británica: "Como en años anteriores, el Príncipe de Gales depositará una corona de flores en nombre de Su Majestad. Su Alteza Real, junto con la Duquesa de Cornualles, el Duque y la Duquesa de Cambridge, el Conde y la Condesa de Wessex, la Princesa Real y el Vicealmirante Sir Tim Laurence, el Duque y la Duquesa de Gloucester, el Duque de Kent y la Princesa Alexandra estarán presentes hoy en el Cenotafio como estaba previsto", se podía seguir leyendo.
Desde octubre esta hubiese sido su primera aparición, pero de nuevo su salud le ha jugado una mala pasada y al parecer tiene una lesión en su espalda. La noche del 20 al 21 de octubre de 2021 estuvo ingresada en el hospital King Edward VII, ubicado en Londres, donde se le hicieron algunos análisis, pero pronto, justo al día siguiente, pudo regresar a su hogar para descansar. Y aunque no haya estado en activo fuera de su casa, dentro no ha descuidado sus obligaciones institucionales, haciendo videoconferencias con varios líderes internacionales.
Preparando la reunión familiar más esperada del año
Y hace muy poco incluso de desplazó en helicóptero a Sandringham para organizar los planes de cara a Navidad, una festividad que será atípica y agridulce porque será la primera que pasará desde el fallecimiento de su marido el Duque de Edimburgo.