La Reina Isabel II del Reino Unido ha aterrizado en el aeródromo de Casement, situado en Baldonnel, para dar comienzo a una visita calificada de histórica, ya que el último monarca británico que pisó Irlanda fue Jorge V, abuelo de la soberana, en 1911.
100 años después, la abuela del recién casado príncipe Guillermo de Inglaterra se ha desplazado al país vecino junto a su esposo, el Duque de Edimburgo. Destacable ha sido el detalle de la vestimenta de Isabel II, que portaba un conjunto verde, color muy simbólico en Irlanda.
La Reina Isabel II, en Irlanda hasta el 20 de mayo
Tanto la Reina como el Príncipe Felipe han sido recibidos por la Guardia de Honor Irlandesa y por el viceprimer ministro y titular de Asuntos Exteriores, Eamon Gilmore. Posteriormente se han trasladado a la residencia oficial de la presidenta de la República de Irlanda, Mary McAleese, para asistir a la primera recepción oficial de esta visita que durará hasta el viernes 20 de mayo.
Otro importante gesto ha tenido lugar cuando Su Majestad ha depositado una corona de flores ante el monumento que honra a los irlandeses caídos por la causa de la libertad nacional, ubicado en el Jardín del Recuerdo de Parnell Square.
Temor al ataque de disidentes del IRA
El regio viaje se está desarrollando bajo estrictas medidas de seguridad para proteger la integridad física de la monarca y su consorte. Precisamente horas antes de su llegada a territorio irlandés se desactivó una bomba de fabricación casera que se encontraba en el compartimento de equipaje de un autobús en Maynooth, cerca de Dublín.
Las relaciones entre el Reino Unido e Irlanda no han sido fáciles desde que los ingleses invadieran Irlanda en 1171, y pese a que actualmente la paz reina en toda la nación, la Policía irlandesa se mantiene alerta por si pudiera ocurrir un ataque de disientes del IRA en protesta por la visita de Isabel II.