El Duque de York ha realizado su primera aparición pública después de que su nombre se añadiera en una posible conspiración de trata de menores junto al recientemente fallecido Jeffrey Epstein. El Príncipe ha acudido a la Iglesia acompañado de su hija y de su madre, la Reina Isabel, en un coche. Por lo que las imágenes han captado, se puede observar cómo tanto el Duque como la Reina sonríen, haciendo ver que están ajenos a la polémica surgida. Y no solo estaría a su lado en un momento tan complicado para él, sino que además le apoya en su supuesta reconciliación son Sarah Ferguson, quien también estaría con ellos de vacaciones en Balmoral, lugar donde han sido vistos acudiendo a la iglesia.
El amigo del Duque de York se suicidó en su celda después de ser arrestado en 2019 tras ser acusado de abusos sexuales. Aunque un portavoz del Palacio de Buckingham dijo: " Cualquier sugerencia de incorrección con menores de edad es categóricamente falsa ", el Príncipe vuelve a estar señalado. Andrés de York se encuentra envuelto en una gran polémica después de que un fiscal de Nueva York afirmara a Daily Telegraph que necesitarían hablar con el hijo de la Reina y con la exnovia del fallecido para poder esclarecer la investigación.
La Reina Isabel y el Duque de York acudiendo en coche a la IglesiaEl fiscal ha continuado explicando: " El caso que rodea a Epstein está cerrado. Él está muerto. Pero ahora están buscando una conspiración, por lo que puedes aparecer como una persona X, Y o Z. Con todo lo que está sucediendo sería un suicidio político no hablar con ellos. Por su puesto que van a investigar todo esto. No creo que cueste mucho. Considero que el Príncipe Andrés va a cooperar con nosotros si es preguntado. Estoy seguro de que tendrá buenos abogados que hablarán con los fiscales".
El relato de una víctima
Virginia Giuffre ha sido la chica que ha declarado abiertamente que ha sido una esclava sexual de Jeffrey Epstein. Según su relato, a los 17 años sufrió los abusos sexuales del amigo del Duque de York. Por lo visto, conoció a la alta sociedad británica mientras trabajaba en el resort de Donald Trump llamado Mar-a-Lago. También existían otras declaraciones que acusaban directamente al hijo de la Reina de Inglaterra, pero en 2015 fueron eliminados del registro ya que se consideraron inmateriales e impertinentes.
