Es más que frecuente que los británicos organicen grandes actos para festejar el cumpleaños de su soberana. Sin ir más lejos, hacen dos celebraciones: la oficial y la extraoficial. La primera de ellas, según la tradición instaurada hace más de 250 años, tiene lugar en el mes de junio para que coincida con el buen tiempo y así poder celebrar un desfile denominado ' Tropping The Colour '. Luego, la extraoficial se corresponde con el propio día que el soberano esté de cumpleaños.
En el caso de la Reina Isabel II, nacida el 21 de abril de 1926, su 92 cumpleaños comenzó ayer con 41 cañonazos por parte de la Tropa Real de Artillería desde Hyde Park. Se desconoce si la soberana disfrutó de algún tipo de celebración privada con su familia, pero g ran parte de la Familia Real se reunió esa misma noche en el Royal Albert Hall para acudir a un concierto en su honor.
La ocasión lo merecía y al escenario se subieron artistas de la talla de Tom Jones, Sting, Kylie Minogue o Shawn Mendes. Sin embargo, el gran protagonismo estaba en las gradas del mítico teatro. Hasta allí se trasladó gran parte de la Familia Real, encabezada por la propia Reina Isabel junto a sus hijos: el Príncipe Carlos (acompañado de Camilla Parker Bowles), la Princesa Ana, el Príncipe Eduardo y el Príncipe Andrés.
También pudo verse en el palco central a varios de sus nietos mayores, como Lady Louise Windsor (hija de los Condes de Wessex), el Príncipe Guillermo (sin la compañía de la Duquesa de Cambridge, a punto de dar a luz) y la gran pareja formada por el Príncipe Harry y Meghan Markle. No podían faltar tampoco las hijas del Duque de York, las Princesas Eugenia y Beatriz, así como otros conocidos miembros de la familia como la Princesa Alejandra de Kent o los Duques de Gloucester.
El momento de los discursos
En un momento dado del concierto, el Príncipe Harry se subió al escenario para pronunciar unas palabras en honor a su abuela, en las que alababa su labor al frente de la Commonwealth y en las que también hubo hueco para el humor: " Esta noche estamos celebrando el cumpleaños de la reina, pero Su Majestad debe reconocer que no es una persona a la que sea fácil de regalar ".
Al final de la gala, fue la propia monarca junto al Príncipe de Gales quienes se subieron al escenario para mostrar su agradecimiento a los asistentes. Allí, el Príncipe Heredero protagonizó uno de los momentos más divertidos de la velada al iniciar su discurso refiriéndose a su madre como " mummy ". Este chascarrillo provocó las risas del auditorio y la sonrisa cómplice de la Reina.
El Príncipe Carlos aprovechó la ocasión para dedicarle también unas palabras a su madre: " Tengo la sensación de que en 1948, cuando tenías 22 años, no esperabas que en tu 92 cumpleaños estarías acompañada por un hijo de 70 ". A continuación, el Príncipe lanzó unos salves a la Reina y todos los allí presentes se fundieron en un caluroso aplauso en honor a la monarca más longeva de Reino Unido.