La Monarca comenzó su Royal Week en Escocia junto al Conde de Strathearn, acompañante que será relevado por la Princesa Ana.
La Reina Isabel ha vuelto a su querida Escocia, paÃs con el que está muy conectada no solo por ser su Reina, que también, sino por sus maravillosos veranos en Balmoral, en las Highlands, por la semana que pasa cada año allà para cumplir con una serie de actos, asà como por su familia materna, los Bowes-Lyon, cuya casa ancestral es el Castillo de Glamis, lugar en el que la Reina Madre pasó mucho tiempo durante su infancia. Allà además nació la Princesa Margarita. Se suma a todo ello que los Windsor llevan la sangre escocesa de los Estuardo, cuyo apellido se perdió con la muerte de la Reina Ana Estuardo, pasando la Corona a manos de su primo segundo, Jorge de Hannover, descendiente directo de Jacobo I de Inglaterra y VI de Escocia, único hijo de MarÃa, Reina de Escocia.
Pero no era este un viaje de recuerdos, para Balmoral ya habrá tiempo, sino que se trataba de cuatro dÃas de compromisos oficiales en los que la Reina se ha dejado acompañar primero por el PrÃncipe Guillermo en este viaje que supone su vuelta a Escocia tras la muerte del Duque de Edimburgo. El Duque de Cambridge viajó a Escocia, pero solo para esta primera etapa debido a que tiene que estar el 1 de julio de 2021 en Londres para asistir a la inauguración de la estatua de Lady Di en Kensington Palace. Además, previamente va a verla junto a Kate Middleton y sus tres hijos, que tienen la oportunidad de contemplar la estatua de la Princesa Diana en The Sunken Garden antes de que se muestre ante el mundo.Visita a la fábrica de la otra bebida nacional
La Monarca y el Conde de Strathearn, tÃtulo que el PrÃncipe Guillermo utiliza en Escocia, participaron en la Ceremonia de las Llaves en el Palacio de Holyroodhouse de Edimburgo, el mismo lugar en el que los Duques de Cambridge y Condes de Strathearn se quedaron cuando visitaron Escocia en mayo de 2021. Posteriormente, la Reina fue recibida por el Lord Provost de Edimburgo, que fue el que le hizo entrega de las llaves.
Su primer compromiso oficial tras la ceremonia solemne les llevó a la fábrica de AG Barr de Cumbernauld en la que se produce Irn-Bru, uno de los refrescos más famosos del paÃs, tanto que rivaliza al whisky como la bebida nacional de Escocia. Durante su visita, el Conde de Strathearn probó esta bebida. Preguntado sobre si la habÃa bebido cuando estaba en St Andrews en sus tiempos de universitario, contestó que no, pero que sà la bebió cuando servÃa en el Ejército.
La Reina, alegre y enérgica, se mostró encantada de haber podido recuperar la Royal Week a pesar de que la pandemia no permite que se realicen todos los compromisos que tenÃan lugar habitualmente durante su paso oficial por Escocia. Eso sÃ, además de estos actos con el PrÃncipe Guillermo le espera la compañÃa de la Princesa Ana, que hace el relevo al Conde de Strathearn como acompañante de la Reina.