El verano de 2022 es el más atípico para la Infanta Cristina, que ha tenido que realizar sus planes teniendo en cuenta que Iñaki Urdangarin ya no forma parte de su vida. Ha pasado por Mallorca, donde incluso almorzó con el Rey Felipe, por Barcelona, por Cantabria y se marchó a Sotogrande para disfrutar entre amigos.
La Infanta Cristina en bikini junto a Iñaki Urdangarin en BidartFaltaba por aparecer por Bidart, destino en el que pasaba los veranos desde 2012, y donde quería seguir yendo pese a la ruptura con Urdangarin. El motivo era, más allá de estar con sus hijos, pasar unos días con Claire Liebaert, a la que sigue queriendo mucho y a la que deseaba acompañar debido a que en agosto de 2022 los Urdangarin se marchan a Estados Unidos para la boda de un hijo de Cristina Urdangarin y la belga se queda sola porque se siente mayor para un viaje tan largo.
Coincidieron dos días en Bidart
Con lo que no se contaba era con que se produjera un reencuentro entre la Infanta Cristina e Iñaki Urdangarin en el País Vasco Francés. Se daba por hecho que Cristina de Borbón iba a viajar a Bidart cuando el exjugador de balonmano no estuviera por allí, aunque al mismo tiempo eso podría implicar que la Infanta Cristina estuviera muchos días sin ver a sus hijos, y a eso tampoco estaba dispuesta, así que se presentó en Bidart y no tuvo reparos en ver cara a cara al que fue su marido durante casi 25 años.
La Infanta Cristina y Urdangarin en ¡Hola!Su primer reencuentro fue tenso. Urdangarin se levantó para saludar a Cristina de Borbón. Se dijeron un 'hola' y ya está. Estuvieron sentados una media hora, aunque apenas hablaron y no se miraron demasiado. Se evidenciaba que si estaban allí, era por sus hijos. Como señala ¡Hola!, todo cambió cuando estaban sus hijos.
Pablo y Miguel Urdangarin practicaron surf y se bañaron en el mar, un plan al que se unieron Iñaki Urdangarin y su hija Irene. Ese jueves 4 de agosto de 2022 en Bidart se vio el cariño de la Infanta Cristina con sus hijos cuando el jugador de balonmano y su hermano salieron del agua para recibir a su madre. Parecía que había armonía familiar, y la hay cuando están los hijos. Cuando desaparecen de la escena, la cosa cambia y aparecen la seriedad y la tensión. Dos días más tarde, Iñaki Urdangarin se marchó de Bidart. Es posible que viajara con Ainhoa Armentia, con la que sigue adelante con su relación y con la que fue pillado disfrutando del verano en una playa del País Vasco Francés.
