Después de que Jaime de Marichalar e Iñaki Urdangarín salieran de la sala de la Familia Real, ahora se mueven las figuras de las Infantas.
El Museo de Cera de Madrid está teniendo unos días de lo más ajetreados. Si a principios de semana veíamos a Vicente del Bosque tomándose las mediciones oportunas para que le fabriquen su escultura, ahora hemos sabido que las figuras de las Infantas Elena y Cristina también han cambiado de ubicación.
La sala en la que se encuentra la Familia Real española ha sufrido numerosos cambios en los últimos años. Después de la llegada de la Princesa Letizia, Jaime de Marichalar fue desplazado hasta la zona taurina cuando se anunció el 'cese temporal de la convivencia' con la Infanta Elena y terminó saliendo en carretilla cuando firmaron el divorcio.
Posteriormente llegó el turno de Iñaki Urdangarín. El Duque de Palma fue imputado en el 'caso Nóos' y llegó el comunicado de la Casa Real que anunciaba que el marido de la Infanta Cristina iba a quedar fuera de todos los actos oficiales.
Y como la sala de la Familia Real emula precisamente un acto oficial, Urdangarín fue cambiado de ropa. Su traje se cambió por un look mucho más informal para empezar una nueva etapa en la sala de los deportistas por su condición de jugador de balonmano en el Barça y ganador de tres medallas en los Juegos Olímpicos con la Selección. Jaime de Marichalar, fuera del Museo y Urdangarín con los deportistas
Ahora han sido las Infanta Elena y Cristina las que se han movido. Desde Zarzuela se quiere potenciar el papel del núcleo duro de la Corona, los Reyes Juan Carlos y Sofía y los Príncipes Felipe y Letizia, algo que ya se pudo apreciar cuando la Infanta Elena se sentó en el palco de autoridades en la celebración del Día de la Hispanidad.
Desde el Museo de Cera han captado el mensaje y han situados a los Príncipes y los Reyes por un lado, y a las Infantas, por otro. Lo que no ha cambiado son los autendos de gala que lucen como si estuvieran en una recepción oficial.