Galería: La Familia Real Griega en imágenes
En febrero de 2023, una vez realizado un segundo funeral en honor a Constantino de Grecia y transcurridos más de 40 días tras su muerte, Pablo de Grecia concedió su primera entrevista como Jefe de la Casa Real Griega. Lo hizo para Point de Vue, confesando que aunque no iba a residir en Grecia de forma permanente, sí le iban a ver más a menudo en el país. Añadió además que aunque se convertía en jefe de la dinastía, no estaba ligada a responsabilidad oficial y que buscaba mantener el papel que ha mantenido su padre y animar a que siga en la siguiente generación.
Unos meses más tarde, el Príncipe Pablo ha concedido otra, esta vez para un medio griego, el programa '365 momentos' que presenta Sofia Papaioannou. A esta entrevista se unió también su hermano Nicolás, el único hijo del Rey Constantino que vive en Grecia de forma permanente, que se reunió con la presentadora por otro lado.
Se abordó la muerte de su padre, fallecido el 10 de enero de 2023 a los 82 años. A pesar de su edad y de que su salud era muy delicada desde hacía años, Pablo de Grecia confesó que fue bastante repentina y que no se esperaban que hubiera ocurrido tan rápido: " Es difícil, no lo esperábamos tan pronto, nos llegó de repente, pero estaba muy cansado. Sin embargo, la familia es muy unida, mi padre quería que mantuviéramos una familia unida. Como padre era estricto, pero muy amoroso. La historia siempre le pesó pero supo elegir el momento de ser padre. Cuando murió mi abuelo, habíamos cumplido 100 años de reinado", expresó.
Constantino de Grecia se casó ya como Rey de los Helenos con la Princesa Ana María de Dinamarca. Sucedió un 18 de septiembre de 1964. Fueron padres de la Princesa Alexia (1965), el Príncipe Pablo (1967), el Príncipe Nicolás (1969), la Princesa Theodora (1983) y el Príncipe Philippos (1986). La Familia Real Griega, compuesta también por los hijos de Alexia y los de Pablo, residía entre Grecia, España, Reino Unido y Estados Unidos, pero se mantuvo siempre unida y así seguirán siendo, como quería Constantino de Grecia, ese padre al que Nicolás echa tanto de menos: " Es una pena enorme, le echo mucho de menos y es como si no lo hubiera asumido. Fui a comer con mi madre y dije: 'Voy a casa de mis padres'. No sé cuánto tardaré en asumirlo".
El Príncipe Nicolás, que reside en Grecia con su esposa Tatiana y habla griego, como todos sus hermanos, recordó que pese al exilio, de hecho él nació en Roma y se crió en Londres, sus padres les dieron una educación como si hubieran seguido residiendo en Grecia: " Se nos crio con una educación griega. Teníamos un profesor de griego en casa y luego fui a un internado. Estoy agradecido de haber entrado en la vida cotidiana de un griego. Vivir con compañeros de clase cuyo primer idioma era el griego me ayudó mucho".
La Familia Real Griega se exilió en 1967 tras el fracaso del contragolpe comandado por Constantino de Grecia para desalojar del poder a los Coroneles. Se marcharon a Roma, y pasaron por Dinamarca por su parentesco con la Familia Real Danesa y finalmente se quedaron en Reino Unido tras obtener el apoyo de sus primos Isabel II y el Duque de Edimburgo. Ese exilio se antojó permanente en 1974 una vez el resultado del referéndum propuesto decidió que Grecia sería una República. " En el golpe no quería que se derramara sangre y por eso nos fuimos. Hizo todo lo posible para ofrecer lo mejor para su país".
Con respecto al referéndum, el Príncipe Nicolás señaló que su padre "debería haber regresado. Tal vez podría haber hecho algo diferente en ese momento si hubiera tenido la sabiduría y la experiencia que tenía cuando lo escuchaba ". Por su parte, Pablo de Grecia añadió: "Había algunos que le decían que volviera, había mucha gente que quería que volviera a ser Rey. Pero nunca fue posible, la Constitución es la Constitución".
Además del trono, uno de las pérdidas que asumió la Familia Real Griega fue la nacionalidad. Tanto Pablo como Nicolás han expresado que la quieren de vuelta y que su apellido no es Glücksburg, el nombre de la dinastía, sino que llevan el apellido de Grecia: "Me presento como Pablo de Grecia, a veces también como el Príncipe Pablo. No ejercemos como Príncipes de Grecia, pero sí lo somos por nacimiento. No quiero elegir un apellido, tengo el apellido de Grecia. ¿Por qué debería cambiarlo? Cuando se hizo la ley, se hizo para atacarnos. Alguien decidió un día que no tienes nombre... No es un título, es un nombre. Son dos cosas diferentes".
En esa misma línea habló Nicolás: "Me presento como Nicolás. Hay personas que me presentan como el Príncipe Nicolás. No pido que me llamen Su Alteza. No hay razón. En todas partes me sentí un extraño, serví en Inglaterra, pero nunca me sentí inglés. Aquí (en Grecia), sentí que es mi lugar y me da una felicidad tremenda. No es cuestión de elegir un adjetivo. Yo tenía la ciudadanía y nos la quitaron. Por supuesto que estoy buscando la ciudadanía, no tengo apellido. Que te quiten la ciudadanía es una cosa burocrática. Sea griego o no, lo sé. Grecia corre por mis venas, me identifico con este lugar y nadie puede dudarlo. No nos llaman Glyxburg". Además, manifestó que el mayor honor para él sería haber servido en el ejército griego.
Sofia Papaioannou no terminó la entrevista sin preguntar a los dos príncipes si estarían interesados en entrar en política. Esto fue lo que hizo el depuesto Rey Simeón de Bulgaria, que ejerció como Primer Ministro del país balcánico entre 2001 y 2005. El Príncipe Pablo dijo que está interesado en la política griega, pero no para participar de esa forma. En la misma línea se expresó su hermano, que confesó que no es para él.
Lo que quieren y lo que no quieren
De este modo, Pablo y Nicolás de Grecia no aspiran a entrar en política y no parece que busquen tener un papel como el que por ejemplo consiguieron Miguel de Rumanía y su hija Margareta. Pero sí se sienten griegos, y además de poder vivir en el país, algo que sí es posible, desean que se les devuelva la nacionalidad griega que se les retiró definitivamente en 1994. Tampoco les gusta ser llamados Glücksburg, en griego Glyxburg, que de hecho es el apellido que se les da en Grecia, mientras que en el extranjero sí se les conoce como los 'De Grecia'. De hecho, en su DNI, Felipe VI y las Infantas Elena y Cristina se apellidan de Grecia de segundo por su madre, la Reina Sofía, nacida Princesa de Grecia.
A la Familia Real Griega se le concedió pasaporte danés y el Rey Constantino ganó un juicio en el Tribunal Europeo de Derechos Humanos en Estrasburgo por el que se le debía compensar por la pérdida de las propiedades de Mon Repos, en Corfú, del Palacio de Tatoi y una residencia en Polydendri. También hubo compensación para su hermana Irene y para su tía Catalina. No parece que los Grecia busquen dinero, pero sí la reparación que supondría tener la ciudadanía griega.