Uno de los eventos más esperados en el pequeño Principado de Mónaco año tras año es el Gran Premio de Fórmula 1. Durante los días en los que tiene lugar, s u capital se remodela por completo hasta convertirse en un circuito urbano en el que se dejan ver pilotos y celebrities a partes iguales.
Son muchos los actos que tienen lugar durante esos días y en esta última edición los eventos arrancaron el viernes 25 de mayo con un desfile benéfico celebrado en la sala Amber Lounge Unite. El anfitrión fue el expiloto Jackie Stewart, que organizó la gala con el objetivo de recaudar fondos para su fundación ' Carrera contra la demencia '. Sin embargo, fueron varios de sus invitados los que se llevaron todo el protagonismo de la noche.
Se trató de los dos hijos que la Princesa Estefanía de Mónaco tuvo con su primer marido, Daniel Ducruet. Casi podría decirse que fue una ocasión de excepción, porque a diferencia de la prole de la Princesa Carolina, los hermanos Ducruet no son muy dados a exponerse a la opinión pública. No obstante, esta vez Louis y Pauline decidieron dejarse ver y acapararon todos los flashes.
Reaparición esperada de los hermanos
Por un lado, Pauline Ducruet llamó la atención de todos los allí presentes por su belleza y el pronunciado escote que lucía con un mono negro. La joven es considerada ya un referente de estilo y una digna heredera de la belleza que caracterizó a su abuela, la mítica Grace Kelly. Junto a ella estaba también Louis Ducruet, menos propenso todavía a aparecer en este tipo de celebraciones.
El hijo mayor de Estefanía de Mónaco acudió en compañía de su prometida, Marie Chevallier. Se trató de su primera aparición en público desde que en febrero se anunció su compromiso oficial a través de un comunicado. Después de una discreta relación de cinco años, el joven decidió pedir matrimonio a su novio en una playa de Vietnam. Desde entonces, Marie Chavallier luce en su mano izquierda un impresionante brillante que aprovechó para lucir en el citado evento benéfico.
La otra deslucida pareja
Ellos no fueron los únicos miembros de la Familia Real de Mónaco en acudir al desfile, ya que también asistió su prima, la Princesa Alexandra de Hannover junto a su pareja Ben-Sylvester Strautmann. La hija menor de Carolina de Mónaco ha heredado de su madre la pasión por la moda y su presencia en desfiles ha sido una constante a lo largo de su vida, por lo que en esta ocasión que se unían moda y solidaridad su presencia era casi obligada.
En contraste con Louis Ducruet y Marie Chavallier, esta joven pareja todavía no tiene previsto su compromiso pese a sus más de dos años de relación. Aún así, su noviazgo está más que consolidado y cada vez son más los actos a los que acuden juntos. Uno de los últimos fue la boda del Príncipe Christian de Hannover y Alessandra de Osma en marzo de 2018.